Empresa

Zegna pone de nuevo el contador a cero en España tras expirar el último expediente

Italco, la unidad productiva que Ermenegildo Zegna tiene en Barcelona, cuenta en la actualidad con alrededor de 400 trabajadores.

S. Riera

28 sep 2016 - 04:55

 

Ermenegildo Zegna pone de nuevo el contador a cero en España. Italco, la fábrica que el grupo italiano tiene en la localidad de Sant Quirze del Vallès (Barcelona), concluye a finales de este año los expedientes de regulación de empleo (ERE) temporales que se pactaron en 2014 para blindar la plantilla durante estos tres años. A falta de tres meses para que expire el acuerdo, la factoría mantiene la actividad con normalidad con alrededor de 400 empleados.

 

A lo largo de estos dos últimos años, la compañía ha continuado encogiendo su plantilla, tal y como contemplaban los EREs acordados. En este sentido, los pactos contemplaban facilidades para acogerse a la prejubilación, favoreciendo la marcha de las trabajadoras más mayores. En un año, han abandonado la empresa en torno a setenta trabajadores.

 

Fuentes sindicales han explicado a Modaes.es que, por ahora, la empresa no ha contactado con el comité para sentarse a negociar de nuevo e interpretan este gesto como un retorno a la normalidad. En este sentido, portavoces de los trabajadores aseguran que la actividad en la fábrica se mantiene y afirman que incluso han dejado de aplicarse medidas del expediente para poder hacer frente al volumen de trabajo.

 

 

La plantilla se muestra optimista de cara al futuro de la planta catalana, ya que la empresa se ha guardado durante todo este periodo un as en la manga: la posibilidad de renegociar el expediente siempre que las ventas de la empresa retrocedieran más de un 25%. No obstante, a lo largo de la última década Zegna ha reducido de manera significativa su capacidad productiva en Italco, que en 2003 contaba con una plantilla de 1.200 trabajadores y tres fábricas en la provincia de Barcelona, en Sant Quirze del Vallès, Polinyà y Sabadell.

 

Coincidiendo con la liberalización del comercio internacional del textil, el grupo italiano ejecutó dos grandes reestructuraciones en su fábrica española, una de ellas en 2005, cuando concentró la actividad de tres centros a uno solo, y otro en 2009, cuando aplicó su mayor ERE, que afectó a 120 trabajadores. Poco después, el impacto de la crisis dio de lleno en las cuentas de Zegna, forzando a la empresa a recortar de nuevo su actividad productiva y comercial en el país.

 

En 2014, la empresa se sentó con los representantes de los trabajadores para acordar los dos últimos expedientes, que contemplaban la suspensión temporal del empleo, cuya incidencia variaba cada año. Además de facilitar prejubilaciones, el acuerdo contemplaba una compensación económica al finalizar el año y mantenía las pagas extras.

 

Ermenegildo Zegna cuenta con otros centros de producción en el mundo, situados en Italia, Suiza, México y Turquía. La compañía mantiene el control directo de toda su línea productiva, desde la compra de materia prima en Australia hasta sus tiendas en propiedad.

 

El grupo cerró 2015 con una cifra de negocio de 1.260 millones de euros, un 4% más que en el año anterior, pero empeoró su resultado neto, que desplomó un 36,6%, hasta 45 millones de euros. El freno de las ventas en China continental, las inversiones efectuadas en plantas productivas y los planes de expansión penalizaron su rentabilidad.