Zara ‘pincha’ en India en pleno desembarco de los gigantes internacionales de la moda en el país

Zara pincha en India. La enseña estrella del grupo Inditex afloja el ritmo de crecimiento en el mercado indio por primera vez desde su entrada en 2009. Inditex Trent, la sociedad conjunta que la compañía española tiene con el grupo local Tata, ha registrado en el último ejercicio fiscal, que concluyó en marzo de 2014, un descenso del 35% en el beneficio respecto al año anterior.

La sociedad india cerró el ejercicio con un beneficio neto de 299,4 millones de rupias (3,8 millones de euros), frente a los 451,9 millones de rupias (5,8 millones de euros) del año anterior, según The Economic Times.

Inditex Trent registró en 2014 una cifra de negocio de 5.807 millones de rupias (74,3 millones de euros), un 41% más que el ejercicio anterior. Sin embargo, la filial india no pudo mantener la cota de crecimiento del 73% que marcó en 2013.

Los expertos locales atribuyen el menor ritmo de crecimiento del gigante de la distribución a la evolución negativa de algunas aperturas, a lo que se ha sumado la depreciación de la divisa local. Zara inició su andadura en el territorio indio abriendo tiendas en las principales ciudades del país para, en una segunda fase, entrar en localidades secundarias. En estas nuevas localizaciones, las aperturas tienen el mismo coste, pero las ventas distan de ser las mismas.

En cuanto a los efectos de la depreciación de la rupia, Zara ha debido hacer frente a los mismos costes con precios más bajos. Los expertos señalan que esta situación tiene una repercusión directa en el resultado de la empresa.

En los últimos cinco años, los gigantes mundiales de la distribución de moda han apostado fuerte por entrar en el mercado indio. Después de que el Gobierno del país abriera la puerta a la inversión extranjera en comercio minorista en noviembre de 2011, grandes operadores, como Gap, Uniqlo, Marks&Spencer, H&M o Decathlon, entre otros, han ido introduciéndose en el país.