Viriato rebaja el segundo ERE a 40 trabajadores y propone 33 prejubilaciones

Viriato sigue las negociaciones del segundo expediente de regulación de empleo (ERE). La compañía ha propuesto a los sindicatos en la segunda reunión de la mesa negociadora reducir los afectados por el expediente a cuarenta trabajadores, en vez de a los 48 iniciales. De estos, la empresa plantea a los trabajadores un total de 33 prejubilaciones y siete despidos, según han  explicado fuentes sindicales a Modaes.es.

Para las prejubilaciones, la empresa propone para los empleados de entre 55 y 58 años abonar el 60% de la base reguladora hasta los 62 años, y para los mayores de 59, el 70%. Los sindicatos exigirán en las próximas reuniones incrementar el porcentaje de la base reguladora.

Uno de los motivos que provocó el fracaso de las negociaciones del anterior ERE fueron las garantías para el pago de las prejubilaciones. En esta ocasión, la dirección ha aportado como garantía dar el mismo rango a los trabajadores en el cobro de los activos. La parte sindical ya ha avanzado que llevará las garantías a una asesoría jurídica.

Viriato presentó hace diez días un segundo ERE, después de no haber logrado un acuerdo con los trabajadores en el anterior, que negoció el pasado marzo. Después de echar atrás aquel primer expediente, la plantilla emplazó a la compañía a presentar uno nuevo. Este segundo ERE es un calco del anterior y centra la reestructuración de la plantilla en la fábrica que la empresa tiene en Ordes (A Coruña), con el propósito de acomodar la producción a las ventas actuales.

La compañía hispano-argentina Grupo Ríos, propietaria de la empresa de moda, siempre ha mostrado su intención de apoyar la viabilidad de Viriato y de continuar produciendo en su fábrica propia.

La empresa, que forma parte de Grupo Ríos desde 1991, está presente 19 países y en el mercado nacional, con más de 1.000 clientes multimarca, además de corners en la mayoría de los centros de El Corte Inglés. En España la compañía posee también nueve tiendas propias.

El grupo de moda, cuya facturación ronda los doce millones de euros, centraliza el grueso de su producción en su sede central en Ordes, donde cuenta con unas instalaciones de 14.000 metros cuadrados y una capacidad de producción de más de 800.000 prendas anuales.

Además de reorganizar la producción, Viriato tiene previsto reorientar su colección para centrarse en el género de punto y reposicionar la marca. La empresa, que en los últimos años ha apostado por poner en marcha tiendas propias (cuenta con nueve establecimientos en España) también ha renovado su dirección comercial.