Valentino, un perfumado negocio de 300 millones para Puig

De nuevo, un perfume en el centro de una operación corporativa en la que está involucrada Puig. Si el año pasado la compañía catalana se hizo con Jean Paul Gaultier, ahora se acerca a la firma italiana Valentino. Le Male podría ser a Valentina lo que Jean Paul Gaultier es a Valentino para Puig.

La compañía familiar, uno de los líderes del sector de la perfumería, no ha confirmado ni desmentido su acercamiento a Valentino, adelantado ayer por Il Sole 24 Ore. Valentino Fashion Group está controlado por el grupo de capital riesgo Permira.

Aunque Puig ya controla desde mediados de 2010 los perfumes de Valentino mediante un acuerdo de licencia, la adquisición de la compañía fundada por el modisto Valentio Garavani supondría un importante impulso a su negocio.

Puig alcanzó en 2010 una cifra de negocio de 1.202 millones de euros, con un crecimiento del 22% respecto al ejercicio precedente. Valentino Fashion Group, por su parte, suma unas ventas anuales de alrededor de 320 millones de euros.

Valentino Fashion Group divide su actividad en dos divisiones. La primera incluye la marca del característico rojo Valentino, mientras la segunda incluye las licencias de Marlboro Classics y M de Missoni, además de las marcas propias Portrait, Oxon y Lebole.

Hasta diciembre de 2009, Valentino Fashion Group incluía también la actividad de la enseña alemana Hugo Boss, compañía que fue segregada dentro del plan de restructuración puesto en marcha por la empresa italiana para paliar el impacto de la crisis.

Permira, que tomó el control de Hugo Boss y Valentino en 2007, debió hacer frente a un plan de restructuración del grupo, tras renegociar su deuda e inyectar nuevos recursos. Hugo Boss representaba alrededor del 75% de Valentino Fashion Group.

La pérdida de Hugo Boss provocó un adelgazamiento de Valentino Fashion Group, que pasó a facturar 240 millones de euros en 2009. Los planes de la empresa pasaban en aquel momento por crecer hasta 400 millones de euros en cuatro años.

Además de afianzarse en el sector de la cosmética, Puig daría un importante paso en el negocio de la moda de hacerse con Valentino. La moda representa alrededor del 5% del total de las ventas de Puig, propietario también de las marcas Paco Rabanne, Carolina Herrera, Nina Ricci y Jean Paul Gaultier.