Uno de 50 diversifica con complementos y entra en Rusia, Panamá y Guatemala

Uno de 50 entra en una nueva categoría de producto. La compañía española de bisutería, liderada por José Azulay, ha decidido desembarcar en el segmento de los complementos con el lanzamiento de una colección de bolsos de piel. La línea saldrá al mercado entre finales de octubre y principios de noviembre y estará disponible en toda la red de distribución de Uno de 50, tal y como ha explicado Diego García, director general de la compañía, a Modaes.es.

“Queríamos ir más allá de la joyería y la evolución natural era entrar en complementos”, sostiene García. “Inicialmente, la colección estará formada por una treintena de piezas, porque queremos ver cómo responde el consumidor y cuál es la acogida que tienen los bolsos”, añade.

Con un precio medio de entre 200 euros y 300 euros, los bolsos de Uno de 50 están diseñados por el equipo creativo de la enseña y se fabrican con pieles españolas en territorio nacional. “Nuestra marca se caracteriza por el uso del metal y la piel, así que cuando planteamos la creación de una colección de bolsos no contemplamos la opción de utilizar materiales sintéticos”, subraya García.

En paralelo al lanzamiento de su propia colección de bolsos, Uno de 50 prosigue con sus planes de expansión a nivel internacional. La compañía, que en la primera mitad del año puso en marcha una docena de puntos de venta, tiene previsto inaugurar cuatro establecimientos más hasta final de año en Rusia.

“En agosto pusimos en marcha nuestra primera tienda en Rusia, en el centro comercial Metrópolis de Moscú”, explica el director general de Uno de 50. En lo que queda de año, la enseña inaugurará cuatro establecimientos más en el país, dos de ellos ubicados en Moscú, uno en San Petersburgo y otro en Ekaterimburgo.

Además de la tienda abierta en Moscú, durante el verano Uno de 50 también ha puesto en marcha sus dos primeros puntos de venta en Panamá y Guatemala, donde hasta entonces no tenía presencia, así como sus dos primeros corners en los centros que el grupo alemán Karstadt tiene en las ciudades germanas de Bremen y Colonia.

En España, la compañía inauguró en junio su tienda número cien en todo el mundo en Madrid. El establecimiento, ubicado en el número 54 de la calle Serrano de Madrid, se ha convertido en el nuevo flagship store de Uno de 50 en la capital, pese a que la firma no está apostando por abrir puntos de venta propios en España.

Uno de 50 cuenta con una red de distribución consolidada en el mercado nacional y sólo plantean ampliarla si surgen oportunidades de abrir un establecimiento en ejes prime como la calle Serrano de Madrid o Paseo de Gracia en Barcelona. Mientras que la compañía ya ha encontrado ubicación en Madrid, sigue buscado un local adecuado en Barcelona en el que poder instalar un flagship store.

Fichajes y previsión de crecimiento

Uno de 50 también está llevando a cabo un proceso progresivo de profesionalización de la compañía con la incorporación de ejecutivos con trayectoria internacional, además de haber incorporado a la segunda generación de la familia Azulay a la gestión diaria.

En este sentido, la compañía fichó en marzo a José Luis Pardos como director de expansión, en sustitución de Carlos Morano, que dejó su cargo para asumir las mismas responsabilidades en la española Pepe Jeans.

Ahora, Uno de 50 ha incorporado a Javier Arévalo, procedente de la multinacional de comida rápida Burguer King, como director de sistemas, y a Miguel Ángel Alonso, hasta ahora responsable de logística de Electrolux Italia, como director de las operaciones logísticas de Uno de 50.

Uno de 50, que tiene una plantilla formada por 350 trabajadores, se ha marcado el objetivo de concluir 2014 con un incremento del 31% en su cifra de negocio, hasta 40 millones de euros en ventas. En 2013, la compañía alcanzó una facturación de 30,5 millones de euros. Actualmente, el 52% del negocio de la empresa se genera en los mercados internacionales.