Empresa

United Colors of Adolfo Domínguez: el grupo gallego avanza hacia el modelo de Benetton

P. Riaño

29 oct 2013 - 04:55

Adolfo Domínguez avanza en la transformación de su negocio. El grupo gallego, inmerso en un plan de reestructuración para dejar atrás los números rojos, continúa reduciendo su red de tiendas propias para priorizar la apertura de franquicias, un canal con el que reduce costes, pero también pierde control de la información y capacidad de dar respuesta rápida a los cambios. El crecimiento mediante franquicias es un modelo en el que basó su desarrollo el grupo italiano Benetton, que ha perdido el liderazgo del sector y busca una nueva ruta para su negocio.

 

A lo largo de los últimos ejercicios, Adolfo Domínguez se ha centrado en conseguir reducir sus costes echando el cierre a aquellas tiendas que no fueran rentables. La mayoría de los puntos de venta de que ha prescindido el grupo han sido tiendas propias y, además, en España.

 

En los últimos doces meses, por ejemplo, todas las modalidades de puntos de venta (propias, franquicias y corners) han reducido su volumen en el mercado español, mientras en el extranjero sólo lo han hecho las tiendas propias. Así, el grupo prioriza actualmente la apertura de franquicias y corners en los mercados internacionales, dejando de lado las tiendas propias.

 

A cierre del primer semestre, la compañía contabiliza un total de 119 tiendas propias en España, a las que se suman 232 corners en El Corte Inglés, un modelo de punto de venta que requiere una “inversión muy limitada”, como reconoció la empresa en su informe semestral de 2011. Mientras en España la empresa ha concluido el periodo con un saldo negativo de 40 establecimientos, en el extranjero el saldo ha sido positivo en 25 tiendas, con la apertura de doce franquicias y 10 corners.

 

Las tiendas propias suponen un coste mayor para la empresa, mientras la franquicia y los corners requieren una inversión inferior (la primera por la alianza con un tercero y la segunda por su menor tamaño). Las franquicias lastran, no obstante, la capacidad de respuesta de las empresas de moda, en un momento en que los grandes grupos del sector basan su negocio en la velocidad.

 

La compañía italiana Benetton sentó las bases de la transformación de la industria de la moda hacia la moda rápida, si bien su apuesta por el crecimiento con franquicias hizo que su modelo de negocio no fuera lo suficientemente reactivo que requería un mercado donde grupos como Inditex crecían con fuerza.

 

Con una red de más de 6.000 tiendas en el mundo, Benetton continúa siendo uno de las mayores compañías del mundo por número de tiendas, pero está siendo sometida a un proceso de reestructuración de su negocio para recuperar el rumbo.

 

Mango es otra de las compañías que ha basado su desarrollo internacional en las franquicias, si bien en los últimos años ha mantenido estable el peso de esta fórmula en su cómputo global de tiendas. Mango cerró 2012 con un total de 2.598 puntos de venta, un 34% de ellos propios y un 66%, franquicias.

 

A cierre de agosto de este año, del total de puntos de venta de Adolfo Domínguez (669), el 68% eran tiendas propias y corners de gestión directa y el 31%, franquicias. A cierre del primer semestre de 2011, las tiendas propias suponían el 71% de los establecimientos totales y las franquicias, el 28%.

 

La política de Inditex en la distribución de tiendas propias y franquicias es completamente distinta. A cierre del último ejercicio (concluido el pasado 31 de enero), de los 6.009 establecimientos de la empresa, sólo el 12,6% correspondían a franquicias, porcentaje muy similar al de un año antes.