Textura reorganiza su consejo tras dar entrada a los dueños de Loreak Mendian

Textura reorganiza su cúpula tras cambiar de manos. El grupo catalán de textil hogar, que pasó a manos de un grupo de family office español el pasado junio, ha completado ahora la operación con la incorporación de sus nuevos accionistas a su consejo de administración.

La compañía, fundada en 1979 por Isabel Criado y Carlos Manchón, fue adquirida en 2005 por los fondos de capital riesgo de Bbva y EBN. El pasado junio, los fondos la vendieron por entre doce millones y quince millones de euros a un grupo de inversores entre los que se encontraban los dueños de la cadena guipuzcoana de moda Loreak Mendian.

En la operación intervinieron también el family office canario CastiCapital, así como otros grupos de inversión catalanes, madrileños y vascos. Los cambios en el accionariado se traducen ahora también en el consejo, que ha revocado a Francisco José Esteve Romero, como presidente y a Enrique Migoya como consejero. Ambos eran representantes de Bbva en el órgano de administración. Del consejo también ha salido Xavier Alomar, quien desde 2008 está al frente de Textura como director general. Alomar permanecerá al frente de la compañía tras la operación, según ha confirmado a Modaes.es.

Al frente del consejo estará ahora Domingo Santana González, director de inversiones el hólding familiar canario CastiCapital, uno de los nuevos accionistas de Textura. El cargo de vicepresidenta lo ocupará Susana Quiñones, ex directora general de Loreak Mendian.

Xavier Alomar, hasta ahora director general de Textura, ha sido revocado como consejero

También han entrado al órgano el resto de family offices que han participado en la operación: Taltrade, representado por Gregorio Carrillo; Biniterm, representado por Pedro Leg; Aser Capital, representado por Daniel Gómez; Casticapital, representado por Susana del Castillo, y Hacienda Los Perales, representado por María del Cristo López.

Textura opera con más de un centenar de tiendas, de las cuales 97 se encuentran en España. Además, la empresa opera con otros doce establecimientos en Andorra, Bulgaria, Rusia y Guatemala. Un tercio de sus puntos de venta son franquiciados.

Según los últimos datos disponibles, la compañía finalizó el ejercicio 2015 (cerrado el 29 de febrero de 2016) con una facturación de 20,8 millones de euros, un 8,7% más que el año anterior. Sin embargo, su resultado neto se encogió un 54,5%, hasta 1,1 millones de euros.

El resultado de explotación anotó una caída más moderada, del 12,9%, hasta situarse en 1,4 millones de euros. La empresa mantiene deudas a largo plazo por valor de 2,9 millones de euros. Las deudas a corto plazo se redujeron un 36,4% durante 2015, hasta 794,497 euros. En ambos casos, el grueso corresponde a deudas con entidades de crédito. Por su parte, los fondos propios se incrementaron un 19%, hasta 6,9 millones de euros.