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Textura abre nueva etapa: invertirá ocho millones para crecer un 50% hasta 2021

La cadena catalana, especializada en textil hogar, está controlada desde el año pasado por un pool de family offices. Al frente de la compañía se encuentra Susana Quiñones, ex directora general de Loreak Mendian, quien también ha entrado en el capital.

P. Riaño / I. P. Gestal

28 jun 2018 - 05:00

Textura abre nueva etapa: invertirá ocho millones para crecer un 50% hasta 2021

 

 

Textura abre un nuevo capítulo tras cambiar de manos. La compañía, especializada en textil hogar, ha puesto en marcha un plan estratégico a cuatro años tras pasar a manos de un pool de family offices el año pasado. La empresa prevé invertir dos millones de euros al año para crecer un 50% hasta 2021.

 

La compañía está pilotada desde el año pasado por Susana Quiñones, ex directora general de Loreak Mendian. Quiñones era también asesora de la familia Itarte, dueños de la cadena vasca de moda, cuando le llegó el cuaderno de venta de Textura, hasta entonces propiedad de BBVA y EBN, y ha pilotado el proceso de captación de nuevos socios junto con Domingo Santana.

 

Ahora, Textura está inmersa en una nueva hoja de ruta que pasa por ampliar la red de tiendas, renovar el posicionamiento y replicar su modelo más allá de Cataluña, la región que hasta ahora concentra el grueso de su red comercial.

 

 

 

 

Actualmente, la empresa cuenta con setenta tiendas y corners propios en España (el 55% de ellos en Cataluña), veinte franquicias en el pasís y otras diez en el extranjero. La empresa está centrando sus esfuerzos en crecer en zonas como Madrid, Levante y el sur de España.

 

Desde el cambio de socios, el grupo ya se ha instalado en la calle Velázquez de Madrid, en el centro comercial Moraleja Green y en Valencia. En lo que queda de ejercicio, la empresa prevé abrir otras dos tiendas en la capital, una en Málaga y otra en el centro comercial Finestrelles de Barcelona, a lo que se sumarán entre seis y siete reformas de tiendas.

 

El siguiente paso será el desarrollo internacional, donde Textura ya ha comenzado la toma de contactos con socios en Francia, México y Portugal. Sólo este año, la compañía invertirá dos millones de euros en reformas, aperturas y sistemas. El ritmo de inversión se mantendrá hasta 2021, cuando Textura prevé sumar al menos 130 tiendas en España y alcanzar cerca de 35 millones de euros de facturación. El grupo recurrirá a financiación bancaria y recursos propios aportados por los socios con ampliaciones de capital.

 

 

 

 

La empresa cerró el ejercicio 2017 (finalizado en febrero de este año) con una facturación de en torno a 23 millones de euros, lo que supuso un crecimiento del 9% en relación al año anterior y del 4% por superficie comparable.

 

“En las tienda donde hemos invertido capex hemos visto un aumento de ventas de inmediato”, explica Susana Quiñones, directora general, a Modaes.es. La empresa, que está en beneficios, prevé mantener un ritmo de crecimiento de entorno al 15% al año. Quiñones descarta que los socios tengan un horizonte de salida. “La voluntad es hacer crecer la empresa, que ya tiene buenos mimbres ya que capeó muy bien la crisis”, adelanta la directiva.

 

En paralelo, la empresa también está renovando su mix de productos, introduciendo más artículos de decoración y accesorios para completar el total look de hogar y motivar la compra por impulso. “Aunque tenemos muy claro que somos expertos en textil y queremos mantener ese posicionamiento, incluir estos nuevos artículos permite vestirlo un poco más”, explica Quiñones.

 

 

‘Hygge’ mediterráneo

Textura ha logrado sobrevivir a la crisis y a la aparición de nuevas cadenas especializada en textil hogar como Zara Home. Bajo la nueva dirección y propiedad, la empresa está dando una nueva vuelta de tuerca a su posicionamiento “aunque mantenido nuestro expertise: no queremos hacer lo que hacen los demás pero en pequeño, sino encontrar nuestro propio lugar”, apunta la directiva.

 

El objetivo es vender el concepto nórdico del hygge pero con los códigos mediterráneos. “Tenemos que incluir moda, porque es lo que pide el mercado, pero queremos reivindicar también el bienestar, los productos atemporales… lo que llamamos el slow home”, apunta Quiñones.

 

“La cultura de socializar en casa, sumado al fenómeno de las redes sociales, que han hecho que mucha gente comparta su decoración, están motivando cada vez más la renovación de la casa y la compra de productos para el hogar, de una manera como hasta ahora se hacía con la moda”, sostiene la directiva.

 

 

 

 

Textura, que emplea a 190 personas, tiene su sede en Barcelona y produce alrededor de un 60% de su colección en Portugal, mientras que el resto de la oferta se fabrica en Asia o Marruecos.

 

La empresa echó a andar en 1979 de la mano de Isabel Criado y Carlos Manchón, que en 2005 vendieron la compañía a los fondos de capital riesgo de BBVA y EBN. Desde el año pasado, Textura está controlada por Casticapital (propiedad de la familia canaria Del Castillo), Taltrade (propiedad de la familia Carrillo, dueña de Mecalux), Beniterm (familia Leg), Aser Capital (familia Gómez), Hacienda Los Perales y El Calero Inversiones (familia Itarte, dueños de Loreak Mendian), así como por Susana Quiñones (ex directiva de Loreak Mendian) y Domingo Santana (vinculado a la familia Del Castillo).