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System Action: ‘sourcing’ flexible y online para salir de la crisis del coronavirus

La compañía ha abierto ya casi todas sus tiendas, salvo tres en Barcelona, y ha recuperado ya a cerca del 50% del personal de tienda afectado por el expediente de regulación temporal de empleo (Erte).

I. P. G.

21 may 2020 - 04:51

System Action: ‘sourcing’ flexible y online para salir de la crisis del coronavirus

 

 

Aprovisionamiento en proximidad y un reciente canal online. Estas han sido las armas de la cadena catalana de moda femenina System Action para hacer frente al fuerte impacto del coronavirus. La empresa ya ha comenzado a abrir sus tiendas y ha recuperado a gran parte de los trabajadores afectados por el expediente de regulación temporal de empleo (Erte). Pero su directora general, Montserrat Figueras, dice que es pronto todavía para pensar en la nueva normalidad.

 

La semana del 9 de marzo, que comenzó con una escalada de casos en Madrid y terminó con la declaración del estado de alarma, Figueras reconoce que “nadie era muy consciente de lo que estaba ocurriendo, había una incertidumbre absoluta”.

 

El viernes, justo antes de que se decretara el cierre de comercios, la empresa abrió sus tiendas, pero el clima era “enrarecido”, recuerda Figueras. “Y en dos días vino la guerra”. La empresa creó que un gabinete de crisis y preparó Ertes de fuerza mayor para todo el personal de tiendas y el 90% de los trabajadores de oficina, hoy ya plenamente reincorporados. En total, la empresa emplea a unas 126 personas.

 

 

 

 

La compañía está desde 2018 en manos de Paz Torras que, según Figueras, “han estado muy involucrados en la gestión y hemos estado en todo momento tomando decisiones conjuntamente”.

 

El equipo que permaneció en la compañía se volcó en la venta online, un proyecto que ha comenzado a impulsarse en los últimos años. Gracias a una campaña de mid season y las entregas en 24 horas, las ventas se triplicaron.

 

Creo que está habiendo compras impulsivas, porque la gente está aburrida en casa, pero me gustaría ver qué ocurrirá una vez que las tiendas estén abiertas y a pleno funcionamiento”, reconoce Figueras.

 

 

 

Junto al online, la otra baza de System Action ha sido el aprovisionamiento en proximidad, lo que le ha permitido mayor flexibilidad para ajustar su oferta. La empresa compra el tejido en España, Portugal, Francia o Italia y realiza en torno a un 95% de la producción en cercanía.

 

Hemos tenido una flexibilidad bastante grande para reorganizar compras -explica Figueras-; pero tampoco queríamos perjudicar más a la cadena, así que hemos evitado cancelar nada que estuviera en curso, tampoco de tejidos”.

La cápsula de bodas, banquetes y playa y cápsula de abril y mayo no se habían empezado a fabricar, por lo que han podido retrasarse. Por su parte, la precolección de invierno, que se introducía en junio, se ha reducido y traspasado a julio.

 

System Action ha reabierto ya la mayor parte de su red comercial, compuesta por veinte establecimientos, y ha recuperado a la mitad de la plantilla de tiendas. “El ritmo es más o menos el que preveíamos, esperemos que se recupere a medida que avancen los días y la gente tenga también un poco más de información”, sostiene la directiva.

 

 

 

 

Aunque es pronto para hacer previsiones, la compañía considera que la caída irá moderándose en los próximos meses y la recuperación podría comenzar en el cuarto trimestre. “Pero por ahora es todo incierto”, sostiene Figueras. La empresa factura en torno a trece millones de euros.

 

System Action también ha congelado sus planes de internacionalización, pero continúa con otros proyectos recientes como su alianza con Asics y el crecimiento en El Corte Inglés, donde retomará las obras de tres nuevos corners esta semana.

 

 

La nueva normalidad

¿Cambiará radicalmente la moda cuando esta crisis termine? “En general, nos olvidamos bastante rápido de este tipo de impactos, pero esto es algo mucho más fuerte que nada de lo que nos haya ocurrido en el pasado y creo que habrá calado hondo en la mente”, dice Figueras.

 

“Aunque nosotros como clientes nos olvidemos, esto de alguna forma nos habrá hecho cambiar y quizá apostemos más por lo local y tendremos más cuidado con el entorno”, opina la ejecutiva.