Empresa

Studio F, el ‘Mango’ colombiano, ordena su crecimiento

6 oct 2010 - 00:00

Modaes.- Cada vez son más las cadenas europeas que apuestan por países latinoamericanos para sostener su crecimiento. Colombia se ha convertido en uno de los principales mercados de moda de Latinoamérica y empresas como Mango (con once tiendas) e Inditex (con 21 establecimientos) lo han puesto en su punto de mira. Sin embargo, en el país existen ya cadenas que cuentan con una amplia penetración. Studio F, el Mango colombiano, se prepara para acelerar su crecimiento.Las producciones fotográficas de Studio F no tienen nada que envidiar a la de cualquier cadena europea. Tampoco su sistema de distribución. Con sede en Santiago de Cali (la tercera ciudad más poblada de Colombia), la compañía diseña, fabrica y distribuye sus prendas en una red de 160 tiendas, que cada semana reciben producto nuevo. La empresa, de capital familiar, ha experimentado un gran crecimiento durante los últimos años, coincidiendo con el momento en que Carlos Acosta (hijo de la fundadora) tomó las riendas del negocio. Studio F ha crecido a un ritmo de quince aperturas anuales y su red de tiendas se ha extendido a México, República Dominicana, Panamá, Venezuela y Ecuador. Con una facturación anual de alrededor de cien millones de dólares, la compañía emprende ahora un proceso de reorganización para potenciar su crecimiento. Para llevar a cabo este proceso, Studio F se apoya en la consultora española Plus Value, entre cuyos clientes figuran firmas como Lydia Delgado y Diesel.El punto de partida de esta transformación tuvo lugar hace seis meses. Studio F incorporó entonces un equipo de tres directivos, entre los cuales figura el español Higinio Andrade, director de imagen y comunicación. Tras la formación de la nueva cúpula, Studio F contrató a Plus Value para llevar a cabo una redefinición de sus procesos de construcción de colecciones y la gestación de una estrategia de crecimiento. La empresa, que opera en el mercado con las marcas Studio F (con un posicionamiento similar al de Zara en Latinoamérica) y Ella (con precios más asequibles), cuenta con una plantilla de 1.500 personas. Studio F posee una factoría propia en Colombia (que cubre todo el proceso productivo), aunque también compra prenda terminada en China. Como Mango, la cadena colombiana combina las colecciones diseñadas por su equipo creativo con otras de inspiración en las las tendencias de las principales firmas del mundo. Cuando se complete la reorganización interna, la empresa emprenderá un proceso de expansión internacional. La compañía, que mantiene crecimientos del 30% durante los últimos años, se limita, de momento, a Latinoamérica. Los patrones de sus prendas (adaptados a la mujer latina) y la estructuración de sus colecciones (sin producto para invierno) limitan, de momento, su expansión en Europa.