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Soy Pitita, de fenómeno viral a empresa en ciernes

Juanjo Rengel puso en marcha la start up en 2017, después de publicar en Twitter la foto de una camiseta y un eslógan haciendo referencia a Operación Triunfo, que se hizo viral.

Laura Juanes

22 ene 2021 - 04:51

Soy Pitita, de fenómeno viral a empresa en ciernes

 

 

“Ay, no sé, buah qué horror”. Con esta frase, pronunciada en el programa Operación Triunfo, arrancó en 2017 Soy Pitita, de la mano de su fundador, Juanjo Rengel. El emprendedor, que procede del sector de la comunicación, se adentró en la industria de la moda de forma accidental tras publicar en Twitter una foto con el eslogan estampado en una camiseta. Tres años después, Soy Pitita se ha afianzado como marca digital.

 

Rengel arrancó con la start up con una inversión de 150 euros, dedicada íntegramente a la producción de cincuenta camisetas. En cuestión de una hora, la empresa agotó el stock e, identificando una oportunidad de negocio, empezó a crear nuevos diseños y a distribuirlos al ritmo de la actualidad. Desde el talent show español hasta anécdotas de las elecciones estadounidenses, Soy Pitita ha ido creciendo al calor de las consignas virales en la Red.

 

La start up opera sobre pedido, invirtiendo sólo cuando tiene que producir y adaptándose al ritmo de la actualidad, que es la que pone sobre la mesa los diseños de las prendas. Desde su fundación, ha ido ganando notoriedad, traspasando fronteras hasta llegar con los años a Europa, Estados Unidos o Brasil. No obstante, las ventas exteriores sólo copan por el momento el 10% del total.

 

 

 

 

En marzo, con el estallido de la pandemia en España, Rengel llegó a un punto de inflexión con Soy Pitita. Durante los primeros años de vida de la start up el emprendedor compaginaba el proyecto con su trabajo como dependiente en una tienda de Cos. “Pero estuve afectado por un Erte, y como era autónomo no podía cobrarlo”, explica. Ante este contexto, Rengel apostó por el negocio, invirtiendo en una máquina propia de estampado de camisetas y dedicándose exclusivamente a la start up desde su casa.

 

Por ahora, Soy Pitita, que nació nativa digital, sólo distribuye a través de su canal online, pero el próximo año espera aliarse con algún establecimiento multimarca para distribuir sus productos. “Tuve una mala experiencia con una tienda después del confinamiento, pero quiero volver a probarlo”, argumenta el emprendedor. La empresa preveía cerrar el ejercicio 2020 multiplicando la facturación de 2019, hasta 60.000 euros.

 

 

La Red como aliada

Tras el lanzamiento de la primera tanda de camisetas, personalidades como el presentador de Operación Triunfo, Roberto Leal, contribuyeron a aumentar la visibilidad de la marca en la Red. Más recientemente, la start up ha lanzado una colaboración con la cantante Zahara, que ha tenido una buena acogida. “Cada mes es mejor que el anterior”, explica Juanjo Rengel, señalando además que, de momento, no tiene previsto dar cabida a nuevos socios.

 

La start up repone su stock cada dos semanas y los precios de sus artículos oscilan entre los 15 euros y los 43 euros, dependiendo del producto. En 2021, la empresa espera seguir creciendo al mismo ritmo que en 2020, abrir una oficina, ya que por el momento el emprendedor trabaja desde casa, además de contratar a algún trabajador.