Empresa

Smash echa el cierre

La empresa tiene en marcha un proceso ordenado de liquidación de sus activos. El pasado marzo, presentó un ERE sobre el cien por cien de su plantilla. Ahora, tiene en venta sus marcas.

P. Riaño

29 oct 2020 - 05:00

Smash echa el cierre

 

 

Varias colecciones malas, una inversión elevada en el lanzamiento de una marca y el Covid-19. Esta ha sido la sucesión de acontecimientos que han llevado a la empresa española de moda femenina Smash, controlada por el fondo Fordahl Capital, a echar el cierre. Según han confirmado a Modaes.es fuentes cercanas a la empresa, Smash está llevando a cabo un proceso ordenado de liquidación de sus activos.

 

Posicionada en un segmento de precio medio y con compañías como Desigual como competidores, los propietarios de la empresa han decidido optar por llevar cabo un “proceso ordenado de cierre” ante la falta de viabilidad del negocio, con previsiones para reducir sus ventas un 50% en 2020 y un 2021 “muy cuestionado”.

 

Fuentes conocedoras de la situación de la compañía señalan que es consecuencia de varias temporadas complicadas, que coincidieron con una inversión relevante en la compra y relanzamiento de la marca One Green Elephant. Así, el coronavirus pilló a la empresa con el pie cambiado al paralizar su negocio.

 

 

 

 

La empresa ha completado la venta su stock (que ascendía a alrededor de 100.000 prendas) y ha hecho frente a los compromisos con bancos y proveedores. Asimismo, ha llegado a un acuerdo con el comité de empresa tras presentar un expediente de regulación de empleo (ERE) sobre el cien por cien de su plantilla (formada por 47 personas) el pasado marzo.

 

Philippe Bach, director general de Smash desde 2010, abandonó la empresa el pasado julio. Actualmente, la compañía mantiene una estructura mínima para gestionar el cierre, un proceso que podría durar más de un año, operando con la sociedad inactiva mientras trata de buscar un comprador para sus marcas.

 

La empresa ha sacado ya al mercado las cinco marcas que componen su cartera: Smash, Mismash, Paramita, One Green Elephant y Happy Barcelona Style. De momento, la incertidumbre que reina en el mercado está dificultando la posible operación.

 

 

 

 

Con sede en el municipio barcelonés de Badalona, Smash finalizó el ejercicio 2018 con una cifra de negocio de 9,09 millones de euros, con una caída del 10% respecto al año anterior, según las últimas cuentas disponibles en el Registro Mercantil.

 

El resultado neto de la compañía, en cambio, se desplomó en el último ejercicio con datos disponibles: la empresa ganó sólo 59.608 euros, nueve veces menos que un año antes, cuando el beneficio fue de 578.530 euros.

 

Smash inició su trayectoria en Ámsterdam en 1998 de la mano del británico Yoel Gross y el holandés Amit Rahamim, que distribuían ropa que importaban de Asia. En 2005, la empresa se estableció en Barcelona y en 2011 el fondo Fordahl entró en el capital y terminó haciéndose con la mayoría en 2014, cuando la compañía contaba con un centenar de empleados.

 

Fordahl, con sede en Banyoles (Girona), está liderado por Tom M. Bouman y John Pinnel y en su histórico de operaciones figuran sectores como la seguridad, la microelectrónica o los fertilizantes.

 

Tras la incorporación de Fordahl como accionista, Smash comenzó una etapa de diversificación, primero a partir de la marca principal y después con adquisiciones. En 2012, tras entrar en el segmento del calzado y de la moda infantil con su primera marca, la compañía lanzó la marca Mismash. A finales del mismo año, Smash llevó a cabo su primera compra con la adquisición de la firma granadina Paramita.

 

A mediados de 2018, la compañía llevó a cabo otra operación corporativa con la compra de la marca alemana One Green Elephant, especializada en denim y que había cesado su actividad unos años antes.