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Skull Rider sube una marcha: nuevas oficinas y salto a la calle para alcanzar doce millones en 2017

La compañía, controlada por el piloto Jorge Lorenzo y Sito Herrera, cerró el último ejercicio con una facturación de dos millones de euros y trasladó sus oficinas a la localidad barcelonesa de Lliçà de Vall. 

I. P. Gestal

23 mar 2017 - 04:37

Skull Rider sube una marcha: nuevas oficinas y salto a la calle para alcanzar doce millones en 2017

 

 

Skull Rider sube una marcha en 2017. La compañía, controlada por el piloto de MotoGP Jorge Lorenzo y el empresario catalán Sito Herrera, ha trasladado las oficinas y prepara comenzar a distribuir offline para impulsar su facturación hasta doce millones este año, frente a los dos millones de euros del año anterior.

 

La empresa financiará esta expansión con fondos propios, si bien no descarta dar entrada a socios a medio plazo. “Si viene un fondo a buscarnos, encantados, pero tendría que ser un inversor dispuesto a hacer una buena inversión”, ha asegurado Herrera a Modaes.es.

 

Jorge Lorenzo y Rubén Vinagre, quien también formó parte de la puesta en marcha de la ilicitana Hawkers, impulsaron Skull Rider en 2014. El año pasado, Sito Herrera compró a Vinagre su participación y se puso al frente de la compañía con el objetivo e “llevarla al siguiente nivel”.

 

Actualmente, la empresa ha extendido su oferta más allá de las gafas y también distribuye una pequeña colección de textil, con camisetas, bañadores y gorras. Otro de sus proyectos a corto plazo es dar el salto a la calle y comenzar a distribuir sus gafas en ópticas, tiendas multimarca de moda y algunos hoteles.

 

 

 

 

Para hacer frente a este crecimiento, la empresa ha trasladado sus oficinas de Badalona a la localidad barcelonesa de Lliçà de Vall, que albergan también la sede de Terranova CNC, gestionada también por Herrera. La empresa emplea actualmente emplean a una quincena de personas y prevé es incrementar la plantilla un 30% este año.

 

El motivo del traslado ha sido mejorar la operativa y ampliar el espacio de almacén, que actualmente supera los mil metros cuadrados. “A diferencia de otras marcas, trabajamos con mucho stock y ahora tenemos más de dos millones de euros en gafas”, asegura Herrera.

 

Otro de los ejes de crecimiento de la marca es su alianza con otras marcas. Para este año, la empresa ha firmado un acuerdo con Mattel para desarrollar una línea de gafas inspirada en Barbie y Hot Wheels. “No queremos hacer merchandising, sino crear un producto aspiracional a partir de los valores de la marca”, apunta Herrera.

 

En los últimos años, España ha sido el escenario de un boom de las start ups especializadas en gafas de sol, impulsadas en su mayoría por empresarios ajenos al sector y que tienen en el ecommerce y las redes sociales sus principales armas.

 

El líder en el segmento es Hawkers Group (antes Saldum Ventures), que opera con las marcas Hawkers, Northweek y Wolnoir, entre otras. La empresa cerró el año pasado una ronda de financiación de cincuenta millones de euros, en la que dio entrada a los fundadores de Tuenti y a O’Hara Capital, el fondo del venezolano Alejandro Betancourt.