Empresa

Scalpers, a por su tercer salto adelante

La compañía de moda masculina busca a un socio para dar un nuevo paso en su desarrollo. Hasta ahora, la compañía ha realizado dos operaciones corporativas con las que aceleró su expansión con retail.

C. Juárez

14 abr 2022 - 04:51

Scalpers, a por su tercer salto adelante

 

 

Empezó como una más de toda una generación de nuevas empresas de moda masculina. Si El Ganso, fundada cinco años antes, era estilo british con los colores de la Union Jack, Scalpers era pantalones slim fit y calaveras. Con el apoyo del capital y la exposición de sus fundadores, sobre todo de Rafael Medina, el duque de Feria, Scalpers cogió rápido velocidad de crucero y emprendió un ambicioso plan de expansión apoyado en la diversificación. Ahora, pasada ya la página de la pandemia, busca un nuevo aliado para dar el siguiente salto adelante y llama ya a las puertas del top 10 de la moda en España.

 


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El nuevo desorden mundial de la moda

 

 

Sede

Sevilla

 

Año de fundación

2007
 

 

Especialidad 

Moda masculina
 

 

Puntos de venta

250 tiendas y corners en grandes almacenes

 

Países

Seis contiendas propias

 

 

La empresa echó a andar en Sevilla en 2007, a las puertas de la crisis y en el mejor momento para la moda masculina en el mercado español, de la mano de Borja Vázquez, Marcos Ybarra y Medina. A ellos se sumaron más tarde Alberto Artacho y Alfonso Vivancos, quien hoy ejerce de consejero delegado.

 

Ya en 2012, Scalpers comenzó a buscar socios con los que financiar su ambicioso plan de crecimiento, aunque no cerró ninguna operación hasta 2014, cuando dio entrada al fondo Trendsetters and Fashion, participado por Jaime Bergel en el marco de una ampliación de capital de 1,2 millones de euros. La operación supuso también la entrada del grupo venezolano Phoenix World Trade, exsocio, entre otros, de Inditex en el mercado venezolano.

 

Con esta primera ronda, la compañía aceleró su expansión con tiendas con el objetivo de duplicar su tamaño en un año. En septiembre de 2017, cuando la empresa facturaba treinta millones de euros y contaba ya con 170 puntos de venta, el fondo de Bergel se hizo con la participación de Alberto Artacho y Marcos Ybarra y con la de Laura Vecino, que ostentaba participaciones desde la salida de su marido, Rafael Medina, que había fichado por Inditex en 2014.

 

 

 

 

 

De esta manera, el accionariado de la compañía quedó repartido en un 20% en manos de Vázquez y Vivancos, un 10% controlado por Phoenix World Trade y un 70% por Trendsetters and Fashion.

 

Esta nueva inyección permitió a Scalpers abordar otro de los ejes de su plan: la diversificación. El primer paso fue el lanzamiento en 2018 de Scalpers Woman, para lo que el grupo apostó por un equipo diferenciado de diseño en Madrid (que terminó cerrando), con el objetivo de construir una identidad distinta a la del hombre Scalpers, y por tejer progresivamente una red de distribución independiente.

 

Ese mismo año, llegaron también las primeras operaciones corporativas: la adquisición de Jorge Vázquez y la compra de una participación minoritaria en Victoria, la firma impulsada por Vicky Martín Berrocal junto a un grupo de empresarios en los que encuentran Vivancos y Bergel. Victoria está en stand by desde el estallido de la pandemia y en 2019 Jorge Vázquez pasó a manos del grupo gallego Jealfer.

 

 

 

 

En 2019, Scalpers sumó otra firma a su cartera, Mim Shoes, y prosiguió su diversificación tanto de forma orgánica (con el lanzamiento de perfumes y moda infantil) como con colaboraciones con firmas como Black Limba, de íntimo.

 

Aunque la expansión con retail fue clave en los primeros años de Scalpers, la empresa ha seguido una estrategia racional y ordenada, afianzando siempre cada paso antes de dar el siguiente. Su salto al extranjero no llegó hasta 2016, una vez que el grupo contaba ya con una red consolidada en el mercado español. Su primera pica en el extranjero la puso en México, donde aterrizó de la mano de El Palacio de Hierro en 2013. Después llegarían Chile, Francia, Portugal o Reino Unido.

 

El último plan estratégico, trazado en 2017, contemplaba duplicar su tamaño en dos años, hasta alcanzar en 2019 una facturación de entre 75 millones y 80 millones de euros, con un aporte del 12% del canal online.

 

Finalmente, aquel año se cerró en el tramo alto de aquella horquilla, con unas ventas de 80 millones de euros y un peso online del 15%. Después de años de intenso crecimiento, Scalpers optó por paralizar su expansión para digerir el rápido desarrollo, cerró algunas de sus tiendas en el extranjero y descartó nuevas operaciones corporativas.

 

Aquel paréntesis duró poco: tras contraer sus ventas sólo un 13% en 2020 y recuperar ya en 2021 las cifras pre-Covid, Scalpers acaba de retomar su plan de diversificación con el lanzamiento de una línea de moda de hogar y otra de deporte, bajo el nombre Adrenaline.

 

 

 

A falta de las cuentas definitivas, la empresa cerró 2021 con unos ingresos 110 millones de euros. El resultado bruto de explotación (ebitda) se situó por encima del 15% de las ventas, aunque no hay información corporativa de años anteriores. La línea de mujer aporta ya el 20% de sus ventas y es su gran baza de crecimiento junto con la expansión internacional y el canal online.

 

Con retail, la empresa opera con una red de 250 puntos de venta, incluyendo tiendas y corners en El Corte Inglés y El Palacio de Hierro y tiene presencia directa en seis países: Andorra, Chile, Ecuador, México, Portugal y Turquía. Además, ha firmado alianzas con socios internacionales en Alemania, Suiza, Países Bajos y Bélgica, retomando así su expansión internacional tras cerrar varias tiendas en el extranjero en 2019. El online, por su parte, aporta ya el 24% de la facturación total, a falta de ver cómo evolucionará una vez normalizada la actividad del retail.

 

 

A por el tercer salto

Ahora, Scalpers quiere encarar su tercer salto adelante: Bergel lleva tiempo considerando una salida y la empresa necesita más fondos para encarar el plan estratégico. Con todo, las experiencias de otras compañías invitan a la prudencia: El Ganso, su gran rival en el mercado español, dio entrada a L Capital (hoy L Catterton) en 2014, pero el plan no terminó de funcionar y la familia fundadora terminó recomprando su participación.

 

En el momento de la entrada del fondo, El Ganso facturaba setenta millones de euros y tenía una red de 120 tiendas y corners. En moda femenina, Bimba y Lola ha intentado su venta sin éxito hasta en dos ocasiones: su primer intento lo hizo cuando tenía un tamaño similar al de Scalpers, con 150 millones de euros en ventas.