Rolex refuerza su estructura productiva con una nueva fábrica en Suiza

Rolex reorganiza su estructura productiva. La compañía relojera ha inaugurado unas nuevas instalaciones en la localidad suiza de Bienne diez años después de que el proyecto fuese aprobado. La nueva fábrica, que ocupa una superficie de trece campos de fútbol, está formada por cuatro de las instalaciones que la compañía tenía repartidas entre la ciudad de Bienne y la de Génova. De este modo, Rolex ha integrado todos los procesos de fabricación de los elementos esenciales de los relojes en un solo espacio.

El nuevo complejo, que ocupa una superficie de 400.000 metros cuadrados, está formado por siete edificios en los que están ubicadas las divisiones de maquinaria, estampación y mantenimiento, entre otros. Además, en las recién estrenadas instalaciones, Rolex también cuenta con laboratorios de investigación y desarrollo, así como una división de ensamblaje, necesaria para la fabricación de la maquinaria de relojería.

Este nuevo edificio ha sido inaugurado una década después de que Rolex pusiera en marcha un plan para controlar e integrar todos sus procesos de producción. Las dimensiones del complejo así como la necesidad de comprar terreno extra a la ciudad de Bienne (operación que Rolex realizó en 2006) han hecho que las obras se alarguen durante tres años.

Ahora Rolex cuenta con unas instalaciones integradas en las que desarrolla toda su cadena de valor. Desde la compañía confirman que este nuevo espacio les permitirá optimizar sus procesos de producción y desarrollar en el futuro estrategias de refuerzo en esta área.