Empresa

Richemont sigue los pasos de Kering y crea un ‘hub’ productivo en Florencia

La compañía suiza de lujo ha trasladado a la región italiana el grueso de la producción industrial de bolsos y accesorios de piel de todas sus marcas, tras la buena  marcha de la fábrica con la que ya contaba en la zona para Montblanc.

Modaes

5 jul 2018 - 17:44

Richemont sigue los pasos de Kering y crea un ‘hub’ productivo en Florencia

 

 

Richemont traslada el grueso de su producción a Florencia. La compañía suiza ha decidido crear un hub productivo en la región italiana donde concentrará la producción y el desarrollo industrial de bolsos, cinturones y otros accesorios de piel de marcas como Cartier, Dunhill, Serapian, Purdey y Alaïa.


La decisión de Richemont viene precedida por la buena marcha de la planta productiva de Montblanc en la región, situada en Scandicci y que ha sido rebautizada como Pelletteria Richemont. Además, el grupo suizo tiene en los artículos de piel su segunda mayor categoría de negocio, sólo por detrás de la relojería y joyería, según ha informado Giacomo Cortesi, responsable de la división de peletería, a Il Sole 24 Ore. 

 

Durante los próximos cinco años, Richemont espera duplicar el número de empleados de las instalaciones, pasando de los 110 actuales hasta más de 200 trabajadores en plantilla.

Richemont cerró su ejercicio 2017 con un alza del 3% en sus ventas, hasta 10.979 millones de eurosEl beneficio neto, por su parte, se elevó un 1% respecto al año anterior, hasta 2.158 millones de euros.


El conglomerado suizo no es el único grupo que fabrica en Florencia. Otras marcas de lujo también han decidido producir artículos de piel en la región italiana. El pasado abril, Gucci puso en marcha un hub industrial de 37.161 metros cuadrados y 800 empleados, dedicada al calzado y la peletería.


Por otro lado, Louis Vuitton también ha reforzado su abastecimiento en proximidad. La compañía de lujo tiene previsto poner en marcha en los próximos meses dos nuevas fábricas en las localidades de Sainte-Florence y Beaulieu, en el Valle del Loira con el objetivo es reducir los tiempos de entrega a una semana.