Protocolo recupera ventas prepandemia y se prepara para la recuperación

“Estamos empezando a ver los primeros brotes verdes”. Así define Ruth García Broto, directora ejecutiva de Protocolo, una compañía de moda especializada en trajes de novio, la situación del sector. La empresa, que en 2021 ha superado los niveles de facturación previos a la pandemia, encomienda a 2022 la recuperación. En concreto, la compañía facturó 3,5 millones de euros el año pasado.

“El sector ha sufrido; reconoce García Broto- pero los clientes han venido”. Durante el año pasado, la compañía paralizó la expansión a través de tiendas debido “a la caída de la demanda y al momento incierto” y se centró en ampliar la gama de productos con nuevos tallajes y mantener el número de tiendas y al equipo.

Para 2022, García Broto se mantiene optimista. “Es un año que promete traernos buenos números y la reactivación definitiva de los eventos y las bodas”. Para este año, la compañía tiene previsto retomar sus planes de expansión en nuevos mercados y en el canal online.

Protocolo cuenta con dieciséis tiendas en España y diez establecimientos en México

El mayor mercado para Protocolo es España, donde cuenta con dieciséis establecimientos, entre tiendas propias y franquicias, distribuidos en ciudades como Valencia, Barcelona, Madrid, Bilbao, Málaga, Sevilla o Zaragoza, donde tiene su sede.

Fuera de España, la compañía concentra su presencia internacional en Latinoamérica. En concreto, Protocolo cuenta con una filial en México, que gestiona sus diez tiendas propias en el país. En la región la empresa también opera en Bolivia, Costa Rica y Brasil de la mano de distribuidores.

“Estamos volviendo a arrancar”, explica García Broto sobre su expansión internacional. De cara a este año, la empresa ya ha recibido a distribuidores interesados en llevar la marca a nuevos mercados.

En Latinoamérica, la empresa está presente en Brasil, Bolivia, México y Costa Rica

En el online, la compañía no cuenta con un ecommerce propio. Protocolo opera actualmente con una página web donde asesora virtualmente a sus clientes.

Protocolo dio sus primeros pasos en 1991 de la mano de Mariano García Forcada, que abrió un establecimiento de vestidos de novio en Zaragoza. A día de hoy, la empresa continúa a manos de la familia fundadora.

Protocolo realiza el 95% de sus prendas en talleres de confección ubicados entre España y Portugal. El 5% restante corresponde a la fabricación de trajes de primera comunión a medida, únicamente para el mercado mexicano.