Pisamonas sube una marcha en el offline para cerrar 2019 con treinta tiendas

Pisamonas pisa el acelerador en el offline. La compañía especializada en calzado, que nació como pure player en 2012, se ha marcado como objetivo continuar extendiendo su huella en el territorio con la apertura de diez tiendas más a lo largo de 2019 con miras a cerrar el año con una red de treinta establecimientos.

Con esta fuerte expansión en el mercado español, el propósito de Pisamonas es reforzar la experiencia omnicanal. Según explica Enrique Bretos, cofundador y consejero delegado de la compañía, con este sistema busca “completar el adn de zapatería infantil online con una amplia presencia física”.

En los primeros meses del año, la empresa ha puesto en marcha las primeras cinco tiendas en Córdoba, Logroño, Vitoria, Burgos y Oviedo. “En este plan de expansión online estamos manteniendo un enfoque mixto, entre ubicaciones en ejes prime a pie de calle y en los principales centros comerciales”, apunta Bretos.

Pisamonas ha empezado a abrir establecimientos en centros comerciales para acentuar la capilaridad en el territorio

En este sentido, en Córdoba y en Logroño Pisamonas ha abierto a pie de calle, mientras que en Vitoria, Burgos y Oviedo, la marca se ha estrenado en centros comerciales. En la ciudad andaluza se ha instalado en la calle Gondomar, mientras que en la capital riojana ha alzado la persiana en la calle San Antón, donde comparte acera con Zara, Tous, Bimba y Lola, y Mango.

En Vitoria, en cambio, se ha instalado en el centro comercial El Boulevard; en Burgos, en Camino de la Plata, y en Oviedo, donde la marca ya tenía tienda en el centro de la ciudad, se ha instalado ahora en Intu.

Para la segunda mitad del año, los planes de Pisamonas pasan por mantener el ritmo de aperturas. Para este periodo, el grupo contempla también reforzar su presencia en el mercado portugués, donde entró el año pasado, con la puesta en marcha de un tercer establecimiento, después de instalar los dos primeros en Lisboa y Oporto.

Pisamonas, que cuenta con una plantilla de cincuenta personas, tiene su sede establecida en Madrid y también opera con un centro logístico en la ciudad de Toledo. Con sólo siete años de trayectoria en el mercado, la compañía ha registrado un fuerte avance, situándose en 2017 con ventas de nueve millones de euros.

La compañía arrancó en 2012 de la mano de Bretos junto a su esposa y otro matrimonio que apostaron por la venta online de calzado infantil en un momento en que este segmento apenas tenía presencia en la Red. Hasta el momento, la compañía ha financiado toda su actividad con fondos propios y créditos bancarios, sin la entrada de capital ajeno.