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Nuevo relevo en Grupo Cortefiel: Miguel Ibarrola sustituye a Javier Campo en la presidencia

Modaes

7 jun 2016 - 13:41

Nuevo relevo en Grupo Cortefiel: Miguel Ibarrola sustituye a Javier Campo en la presidencia

 

Los cambios en la cúpula de Grupo Cortefiel continúan. La compañía ha anunciado la renuncia de Francisco Javier Campo al cargo de presidente no ejecutivo y abandonará también el consejo de administración del grupo. Miguel Ibarrola, miembro del consejo de Grupo Zena y de Berlys Corporación Alimentaria, le relevará en el cargo.

 

La renuncia de Campo se debe, según la empresa, a “sus crecientes compromisos profesionales como presidente de Aecoc y la pertenencia a consejos de administración como los de Bankia o Meliá Hotels International, entre otros”.

 

Miguel Ibarrola tiene una larga trayectoria profesional  en compañías como Arthur Andersen,  Grupo Navidul y Campofrío.  Ibarrola se incorporó a Grupo Zena en 2003 como consejero delegado hasta 2015, coincidiendo durante seis años con Javier Campo en su etapa como presidente. 

 

 

 

 

En el último año, Grupo Cortefiel ha llevado varios cambios en su cúpula. En marzo, Ramón Gago abandonó la empresa y fue sustituido por Jaume Miquel al frente de la cadena Cortefiel y en julio de 2015 la empresa había renovado el puesto de consejero delegado. Berta Escudero, que hasta entonces era directora general de aprovisionamiento, sistemas y organización, relevó a Juan Carlos Escribano en el puesto.

 

A la espera de que la compañía presente sus resultados correspondientes al ejercicio 2015, Grupo Cortefiel cerró el ejercicio 2014 con una cifra de negocio de 1.011 millones de euros, lo que supone un incremento del 4,9% respecto al año anterior. La compañía logró así recuperar la cota de los mil millones de euros y mantener su tercera posición entre los grupos de moda en España, por detrás de Inditex y Mango, y por delante de Desigual.

 

En paralelo, la empresa ha solicitado a las entidades financieras el inicio de la refinanciación de su deuda, después de que los fondos propietarios hayan tanteado la venta de la compañía e, incluso, una salida a bolsa.