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Never on Sunday, complementos para hombre ‘made in Spain’

C. Pareja

11 jun 2012 - 04:45

El hombre se ha convertido en un nicho a explotar por las marcas de moda. Durante 2011, el 32,7% de la facturación del comercio textil en España correspondió a moda masculina frente al 37,4% copado por la moda femenina, según el informe anual elaborado por la Asociación Empresarial del Comercio Textil y Complementos (Acotex).

 

Muchas de las grandes cadenas de moda han hecho ya su apuesta por el público masculino añadiendo a sus colecciones una pequeña parte dedicada a este público. Por otra parte, los complementos son una de las pocas divisiones de moda que no se han visto tan afectadas por la coyuntura económica. Los fundadores de Never on Sunday han decidido aunar estos dos conceptos, hombres y complementos, y lanzar una marca de bolsos para el consumidor masculino.

 

La compañía acaba de empezar a operar en el mercado, pero “lleva gestándose desde agosto de 2011”, asegura Enrique Matarín, uno de los fundadores de la marca. Detrás de Never on Sunday se esconde un equipo con una larga trayectoria en el sector de los complementos.

 

Mientras Enrique Matarín y Ramón Simbola se han dedicado durante quince años a la creación de complementos para mujer en numerosas marcas españolas, Inés Coronas lleva más de cinco años liderando la firma de moda de baño DosMares. “Con nuestra experiencia en el sector, creímos que era el momento de crear una firma de complementos para el hombre, ya que es un nicho a explotar”, aseguran desde Never on Sunday.

 

La enseña, con sede en Barcelona, se creó con una inversión de 60.000 euros. Never on Sunday fabrica todos sus complementos en talleres españoles. “Queremos que nuestro valor añadido sea la marca España, por eso mismo fabricamos todo en Cataluña y en Andalucía”, explica Coronas.

 

Never on Sunday, que divide su colección en seis secciones que representan seis días de la semana, cuenta con un único punto de venta en España, ubicado en Barcelona. “La idea es contar con la colaboración de una tienda de referencia por ciudad –dice Matarín-; ya estamos cerrando acuerdos para empezar a operar en Oporto (Portugal) antes de finalizar el año”.

 

“Nuestra vocación es totalmente internacional”, añade el empresario. París, Los Ángeles y Estocolmo son también mercados que Never on Sunday ya está estudiando para empezar a vender sus complementos masculinos.

 

La compañía no tiene aún una previsión de cómo cerrará su primer ejercicio fiscal en cuanto a ventas. “Nos hemos marcado el objetivo de recuperar lo invertido para poder seguir creciendo en el mercado, pero no sabemos si lo lograremos o no, todo depende de la aceptación que tengan nuestros complementos”, concluye Matarín.