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Menorquinas Popa, el socio zapatero de los grandes de la moda acelera con su marca propia

La empresa, que inició su actividad en 2015, cerró el pasado ejercicio con una cifra de negocio de dos millones de euros, que espera duplicar en 2016.

S. Riera

12 sep 2016 - 04:47

 

De fabricar las menorquinas para los grandes de la moda en España a pisar el acelerador con su propia marca. La familia Lucas, con larga trayectoria en la industria ilicitana del calzado, se embarca ahora en su propia enseña, Menorquinas Popa. La nueva empresa, que empezó a operar a principios de 2015, cerró el año pasado con ventas de dos millones de euros y prevé cerrar el ejercicio en curso con una cifra de negocio de cuatro millones de euros.

 

Los representantes de la segunda generación de una familia dedicada al calzado han dado la vuelta al negocio. Del taller de fabricación de plantillas que puso en marcha su padre, Plantillas Alzabares, los hermanos Lucas han creado en los últimos años una empresa dedicada al aprovisionamiento de menorquinas y han lanzado su propia marca.

 

“Empecé hace siete años en la India fabricando bolsos y zapatos de piel y terminé produciendo menorquinas para las grandes marcas de moda de España”, explica Miguel Ángel Lucas, consejero delegado de Menorquinas Popa. Junto a él están involucrados en el negocio sus hermanos José Ignacio, Ana Isabel y Juan Ramón.

 

 

En la actualidad, el lanzamiento de la marca propia ha ido restando protagonismo a la producción para terceros y, ahora, Menorquinas Popa ya copa el 65% de las ventas totales del grupo. La empresa ha arrancado con fuerza y, además de disparar las ventas, ha incrementado su plantilla, que en menos de un año ha pasado de tener dos trabajadores a contar con once personas.

 

Ahora, con miras a impulsar su crecimiento, la empresa ha absorbido a su fábrica en Elche y ha instalado allí sus oficinas para centralizar toda su actividad de gestión, diseño, producción y logística. La empresa, que comercializó 55.000 pares en el primer año, había superado los 85.000 hasta septiembre y contemplaba rebasar los 100.000 al concluir 2016.

 

Sus planes inmediatos pasan por acelerar su expansión internacional, enfocándola sobre todo a los países del hemisferio sud, que le permitan resolver la estacionalidad del producto. El proyecto de internacionalización de la empresa pasa por introducir, en primer lugar, la venta online, para más adelante salir en busca de distribuidores locales.

 

Las exportaciones suponen por ahora cerca del 30% de las ventas de la compañía y se concentran en mercados europeos, como Grecia, Portugal y Francia. En esta región, Menorquinas Popa quiere abordar Bélgica, Italia y Alemania. La empresa ha acudido a la última edición de la feria italiana Micam en busca de distribución en Europa.

 

Otros países en los que la compañía ha empezado a distribuir sus colecciones son Japón, Corea, Taiwán, Chile, México y Panamá, en los que ahora trabaja para potenciar su presencia. La empresa también ha puesto en su punto de mira Estados Unidos y Australia.