Empresa

Mango da un nuevo ‘traspié’: la expansión y la crisis de Rusia debilitan el beneficio del grupo

C. Pareja

22 abr 2015 - 05:00

Después de dos años de haber conseguido reconducir sus resultados, Mango da un nuevo traspié. El segundo grupo de distribución de moda en España, por detrás de Inditex, finalizó el ejercicio 2014 con una caída del 11% en su resultado neto y con un crecimiento contenido, inferior a sus previsiones iniciales. Según la compañía, la crisis de Rusia, que ha impactado con fuerza en su cuenta de resultados en el segundo semestre del ejercicio, y la nueva política de macrotiendas que ha llevado a cabo Mango en los últimos meses han sido las culpables de que el grupo vuelva a ver una caída en su beneficio tras dos años de subidas.

 

Entre 2009 y 2011, el resultado neto de la compañía se resintió a causa de su política de producto y precios. Mientras que en 2010 la empresa registró una caída en su beneficio del 31,7%, hasta 101 millones de euros, en 2011 el retroceso fue mayor, obteniendo un resultado de 62 millones de euros, un 38,6% menos. Ante esta situación, Mango tomó cartas en el asunto y viró su estrategia.

 

Una bajada de precios del 20% y un cambio de orientación en su producto hicieron de 2012 el año del giro de Mango. Tras conseguir reconducir su cifra de negocio, con un crecimiento del 20%, hasta 1.691 millones de euros, y una evolución del 82% de su resultado neto, hasta 113 millones de euros, la compañía dio por superado uno de los momentos menos brillantes de su historia.

 

Ese año fue también el que escogió Mango para iniciar su diversificación, con el lanzamiento de nuevos conceptos, como Mango Sports & Intimates, y comenzaba a planear la salida al mercado de nuevas cadenas, como Mango Kids, especializada en moda infantil,  y una cadena de tallas grandes, bautizada bajo el nombre de Violeta by Mango.

 

En 2013, y con su diversificación en pleno apogeo, Mango continuó reconduciendo su rumbo: la compañía registró un beneficio de 120 millones de euros, un 6,6% más que el año anterior, y elevó su cifra de negocio un 9%, hasta 1.846 millones de euros. Aunque las cifras fueron más tímidas, Mango continuó viendo los resultados de su cambio de estrategia.

 

Mango debía haber recogido los frutos de su diversificación en 2014, pero la evolución de su cifra de negocio y el resultado neto de la compañía no han evolucionado en la dirección esperada.

 

Si bien es cierto que la facturación del grupo se ha elevado un 9%, hasta 2.017 millones de euros, el crecimiento es casi idéntico al del año anterior, cuando la compañía operaba sólo con sus conceptos Mango y Mango Man. En cuanto al resultado neto, Mango ha pasado de ganar un 6% más en 2013 a registrar una caída en su beneficio del 11,2%, hasta 107 millones de euros. El grupo ya comunicó a mitad de año que rebajaba sus expectativas para 2014, que pasaban inicialmente por crecer un 17% en el pasado ejercicio y alcanzar una facturación en torno a 2.122 millones de euros.

 

“Este año hemos apostado por una nueva política de macrotiendas, con la que hemos llevado a cabo una gran inversión (Mango ha abierto 43 nuevos establecimientos de gran formato), además, la crisis de Rusia, un mercado en el que tenemos una gran presencia, y el cambio de divisas ha penalizado nuestra cuenta de resultados en el segundo semestre del año”, explican fuentes de Mango.

 

Fruto de este traspié, la evolución del margen (beneficio neto sobre ventas) y el resultado bruto de explotación (ebitda) de la compañía también se ha visto penalizado. Mientras que el ebitda del grupo se redujo un 3%, hasta 223 millones de euros, el margen de Mango ha sido del 5,3% en 2014, tras dos años en que el margen de la empresa se situaba en torno al 6,5%.

 

En 2014, Mangó firmó el primer crédito sindicado de su historia, al alcanzar un acuerdo con diez entidades financieras para obtener 300 millones de euros para financiar su expansión. Tras una profunda reestructuración de su cúpula directiva en los dos últimos años, el grupo prevé continuar con su estrategia de expansión, con una inversión de 300 millones de euros este año.