LVMH valora a Textil Lonia en más de 150 millones de euros para la venta de su 25%

LVMH tiene precio para su participación en Sociedad Textil Lonia. El gigante francés del lujo valora en cuarenta millones de euros el 25% del capital que controla en la compañía gallega, de manera que el conjunto de la empresa asciende a 160 millones de euros. LVMH ha puesto en venta sus acciones en Textil Lonia, propietario de la licencia para fabricar y distribuir la marca CH Carolina Herrera y Purificación García.

En la memoria del grupo francés correspondiente al ejercicio 2013, la empresa presidida por Bernard Arnault establece un valor neto de 40 millones de euros para su participación en la compañía gallega. LVMH incluye Textil Lonia en la categoría de activos susceptibles para la venta, junto a la participación en Hermès y Tod’s, entre otras. LVMH se ha anotado en su patrimonio 32 millones de euros fruto de la revalorización de los títulos de Textil Lonia desde su adquisición.

LVMH controla el 25% de Textil Lonia a través de la sociedad Sofidiv, mientras el 75% restante está en manos de los hermanos Jesús, Josefina y Francisco Domínguez. A mediados del próximo agosto, LVMH comunicará formalmente su decisión de vender su participación a los hermanos Domínguez, que tienen derecho de adquisición preferente sobre las acciones puestas en venta.

La compra de la participación de LVMH por parte de los hermanos Domínguez es, según fuentes cercanas a la empresa, la opción más probable. Sin embargo, existen dos posibilidades más que también se contemplan: la primera sería la adquisición por parte de un inversor interesado en el sector y la segunda sería que Puig, propietario de la marca Carolina Herrera, se hiciera con la participación.

La salida de LVMH de Textil Lonia se produce por la madurez de la inversión. Por otro lado, las mismas fuentes señalan que no se trata de un “negocio estratégico” para el gigante del lujo, al no contar con una participación mayoritaria en la compañía, no ser dueño de la marca y, además, operar en un sector en el que LVMH ya cuenta con muchas enseñas.

Textil Lonia está presidida actualmente por Josefina Domínguez y Francisco Domínguez es consejero delegado, mientras Jesús está centrado en el desarrollo de Bimba y Lola, la cadena de complementos que fundaron sus hijas en 2006.

Ideada como una empresa industrial al servicio de la explotación de marcas, Textil Lonia ha llevado sus tiendas a todo el mundo de la mano de la licencia de CH Carolina Herrera. La compañía se ha convertido ya en uno de los mayores grupos del sector en España, con una cifra de negocio de 253,93 millones de euros a cierre del ejercicio 2013, finalizado en febrero de dicho año.

En los últimos cinco ejercicios, es decir, del cerrado en febrero de 2008 al concluido en febrero de 2013, Textil Lonia ha elevado sus ingresos un 25%, desde los 200,67 millones de euros registrados en 2008.  El resultado neto de la empresa se situó en 36,54 millones de euros en 2013, con una leve caída respecto a los 37,64 millones de euros de un año antes como consecuencia de su plan de expansión internacional.

A cierre del ejercicio 2013 (concluido en febrero de 2013), Textil Lonia contaba con una red de distribución formada por 516 establecimientos, de los que 280 correspondían a puntos de venta de Purificación García y 236 a tiendas deCH Carolina Herrera. Un año antes, la compañía gallega distribuía sus productos en 489 puntos de venta monomarca.

Textil Lonia tiene una estructura internacional formada por una decena de filiales ubicadas en todo el mundo. La compañía inició su andadura internacional en 2003 con la constitución de una sociedad en Estados Unidos, para posteriormente abrir otra en Portugal. Dos años después, Textil Lonia prosiguió con sus planes fuera de España con la constitución de una filial en México; en 2010 hizo lo propio con la creación de una estructura propia en Reino Unido; en 2011 en Francia, y a lo largo de 2012 en Japón, Corea del Sur y Chile, mientras que en 2013 puso en marcha filiales en Singapur y China.

Sociedad Textil Lonia se fundó en 1997 tras la salida a bolsa de Adolfo Domínguez, momento en el que Josefina, Jesús y Francisco Javier Domínguez aprovecharon para desprenderse de su participación en la empresa familiar y poner en marcha su propia compañía.

La empresa, que es propietaria de Purificación García, pronto se hizo con la gestión de CH Carolina Herrera (marca propiedad del grupo de perfumería y moda Puig) a través de una licencia y actualmente desarrolla ambas enseñas a nivel internacional, aunque con estrategias diferenciadas. Mientras que con CH Carolina Herrera la compañía ha apostado por implantarse en las principales capitales del mundo con tiendas emblema, con Purificación García el crecimiento se ha centrado en mercados como Latinoamérica.