Empresa

Liz Claiborne vende su propia marca a JC Penney para hacer frente a su deuda

13 oct 2011 - 00:00

Modaes.- El grupo estadounidense Liz Claiborne se desprende de algunos de sus principales activos. La compañía ha vendido sus marcas Liz Claiborne y Monet a JC Penney, mientras Bluestar Alliance se ha hecho con Kensie y Kohl’s con Dana Buchman.

El paquete de desinversiones supondrá unos ingresos de 328 millones de dólares (240,6 millones de euros) para la empresa. Liz Claiborne, que prepara un cambio de nombre, utilizará los fondos para hacer frente a su deuda y se centrará en las marcas Kate Spade, Juicy Couture y Lucky Brand.

 

El grupo ha llegado a un acuerdo, además, para poner fin a los acuerdos de licencia de DKNY Jeans y DKNY Active a finales del presente año, doce meses antes de lo previsto. El grupo de grandes almacenes JC Penney era licenciatario de Liz Claiborne desde agosto de 2010 y ahora se hará con las marcas Liz Claiborne, Claiborne, Liz, Liz & Co., Concepts by Claiborne, LC, Elisabeth, LizGolf, LizSport, Liz Claiborne New York y Lizwear en todo el mundo.

El consejero delegado de la empresa, William L. McComb, ha explicado que “tras el cierre de estas transacciones, en un momento en que la mayoría de economistas están de acuerdo en que Europa y Estados Unidos tienen riesgos de una nueva recesión, tendremos una compañía más equilibrada y orientada al crecimiento”.

 

Liz Claiborne tiene previsto terminar el año con una deuda de entre 270 millones de dólares (198 millones de euros) y 290 millones de dólares (212,7 millones de euros). Todos estos acuerdos forman parte del plan de reestructuración puesto en marcha por la compañía, que ha supuesto movimientos como la salida del mercado español.

 

A principios de año, la compañía presentó un expediente de regulación de empleo (ERE) para despedir a 323 trabajadores en España, correspondientes todos ellos a personal de ventas en El Corte Inglés.

 

Liz Claiborne cerró su último ejercicio con unas pérdidas de 251,5 millones de dólares (183,8 millones de euros), un 17,7% menos que el año anterior. Las ventas de la compañía se situaron en 2.500 millones de dólares (1.826,7 millones de euros), con un retroceso del 14%.