Empresa

Lenita & XTG se abriga para desestacionalizar sus ventas

S. García

10 oct 2013 - 04:55

“En realidad fue un motivo de necesidad: terminé de estudiar y mis padres querían que volviera a Suecia a estudiar una carrera y yo dije que no, así que me tuve que buscar la vida”. Así explica Lenita Burman sus inicios en la industria de la moda. La empresaria, nacida en Estocolmo en 1968, empezó entonces a fabricar biquinis para sus amigas.

 

“Un día vi a una chica en una piscina y me gustó su biquini, así que me lo hice para mí; a mis amigas les gustó y entonces comenzó todo”, sostiene.De este modo, Burman inició lo que hoy en día es una compañía que factura cinco millones  de euros y que está presente en veinticinco países de todo el mundo.

 

Pero los comienzos no fueron fáciles. “Compré una máquina para hacer los biquinis porque ya vendía a varias tiendas y mis vecinos no me dejaban utilizarla siempre porque hacía mucho ruido”, explica la empresaria. “Además, yo no entendía de escalados ni de patronaje así que busqué al mejor patronista de España y terminé en Barcelona, la ciudad industrial por excelencia, en un curso que impartía Pérez Prat”, recuerda.

 

En tres semanas, Lenita Burman hizo un curso que normalmente se impartía en un año y volvió con un título bajo el brazo y con muchas ideas para una marca que poco a poco encontraba su sitio en el mercado. Fue entonces cuando nació lo que actualmente es XTG, marca que junto a la enseña Lenita integra el grupo Burmen, de la mano de la pareja y socio de Lenita Burman: Luis Mentado.Mentado, que por aquel entonces trabajaba en el bar de su hermano, se unió a Burman para empezar a crear ropa de neopreno para surf bajo la marca XTG.

 

“Empezamos a importar neopreno de Japón, pero el cambio de divisas empezó a ser desfavorable y tuvimos que dejar esa línea de negocio”, explica Burman. Ese cambio llevó a Luis Mentado a iniciarse en el diseño de moda de baño masculina con slips llenos de colores.Esos colores y diseños (que le han servido para posicionarse entre el público gay) son los que todavía hoy caracterizan a una empresa que cuenta con medio centenar de empleados y que fabrica todas sus prendas en las Islas Canarias.Tras los slips de baño llegó la diversificación y XTG empezó a diseñar calzoncillos con estampados y colores.

 

 

“A Luis no le gusta la ropa interior toda gris o negra, por ello siempre ha definido muy bien sus creaciones con colores y diseños que cuando empezamos no se veían en cualquier parte”, sostiene Burman.La entrada en moda íntima fue sólo el inicio de lo que es hoy en día el grupo. Actualmente, XTG cuenta con colecciones de íntimo y baño, así como con camisetas y bermudas deportivas; mientras que Lenita tiene línea de baño, pareos, vestidos y camisetas. “Desde que empezamos con la ropa interior hemos incrementado la oferta de productos para llegar a crear un total look”, explica Burman.

 

El objetivo de la compañía es desestacionalizarse y contar con una oferta para todo el año, no sólo centrada en bañadores.Para poder llegar a cumplir ese objetivo han introducido ropa de calle y en su colección para este invierno incluirán por primera vez vaqueros y plumíferos. Además, como parte de ese plan, la empresa ha relocalizado toda su producción en España.“Al principio producíamos todo en Canarias, pero llegó un momento en el que, por volumen, decidimos fabricar parte de nuestros productos en China”, sostiene Burman. A partir de este verano, Lenita ha concluido ese periodo y ha pasado a fabricar el 100% de su producción de nuevo en las Islas Canarias.

 

En su sede central, ubicada en Las Palmas de Gran Canaria, la compañía cuenta con cerca de 2.000 metros cuadrados de instalaciones, entre fábrica, almacén, logística y el resto de departamentos de Lenita. Desde esa sede se gestionan ahora todos los procesos de la compañía, que obtiene el 75% de su cifra de negocio del mercado español.Disminuir ese porcentaje es otro de los objetivos que se ha marcado la empresa de cara a los próximos años.

 

“Queremos estar en el exterior y sabemos que es necesario, pero preferimos ir poco a poco y no equivocarnos”, subraya Burman. En este sentido, la compañía ya ha vivido un par de experiencias en sus puntos de venta de Londres y Viena, que han hecho replantear la estrategia de expansión, debido a que sus productos, en los que destacan los colores y los estampados vivos, no encajan en climas adversos y que no tienen tantas horas de luz como en países mediterráneos o tropicales.“Por ese tipo de situaciones hemos llegado a la conclusión que necesitamos sitios de calor, tenemos que estar localizados en ubicaciones con climas favorables a nuestro tipo de producto”, explica la empresaria.

 

Por ello, la compañía quiere entrar en ferias como la Miami Swimwear, para poder expandirse a ciudades estadounidenses de estados como California o a países de Latinoamérica como Brasil. No obstante, Burman sabe que no es algo fácil: “son mercados muy competitivos y con muchas empresas dedicadas a la moda baño, por lo que nos queda aún mucho camino por recorrer”, explica. m