Empresa

Larrana refuerza su estructura exterior con oficinas en Nueva York, Toronto, Londres y Qatar

S. Riera

18 dic 2014 - 04:45

Larrana impulsa su negocio exterior. La compañía española de moda infantil refuerza su estructura internacional y abre oficinas de representatividad en Nueva York, Toronto, Londres y Qatar. El objetivo es que, en un año, las ventas internacionales de la marca superen las del mercado español, según ha explicado el propietario y consejero delegado de la empresa, Miguel Ángel Gutiérrez, a Modaes.es.

 

“En la actualidad, éstos son los mercados en los que estamos haciendo negocio”, asegura Gutiérrez. Estados Unidos, Canadá, Reino Unido y Oriente Medio son los principales mercados de Larrana, una de las pocas enseñas españolas de moda infantil que opera en el segmento más alto. Las prendas de la firma, que fundó Gutiérrez junto a su mujer, la diseñadora Marisa Méndez, oscilan entre los 180 euros y los 400 euros.

 

El empresario explica que optaron por la fórmula de las oficinas en representación porque les permite tener un trato más cercano con los clientes de estos países sin necesidad de contar con una fuerte estructura internacional. Larrana contará también con una de estas oficinas en el centro de Madrid para evitar que sus clientes tengan que desplazarse hasta Las Rozas, donde tienen su sede central.

 

A través de este sistema, Gutiérrez confía en que el peso de las exportaciones en su cifra de negocio pase del 35% actual al 50% en la mitad de 2015 y que supere el porcentaje de las ventas nacionales a finales de año. “Necesitamos impulsar el negocio internacional para compensar el retroceso del mercado nacional”, afirma el propietario de Larrana.

 

Junto a la apertura de las oficinas, la empresa también ha optado por abandonar la feria española de moda infantil, Fimi, y apostar por el certamen italiano Pitti Bimbo. En Madrid, durante el salón madrileño, Larrana organizará un evento privado.

 

Fundada hace doce años, la empresa cerró 2013 con una facturación de 1,5 millones de euros, que espera mantener al cierre de 2014. Según Gutiérrez, la compañía espera notar ya el impacto de la inversión internacional en el próximo ejercicio.

 

Por otro lado, en febrero de 2015, la empresa potenciará su segunda línea, que relanza con un nuevo nombre, Inhes. La enseña, cuyo precio final se mueve entre los 120 euros y los 200 euros, busca posicionarse en el segmento medio-alto. La colección está también diseñada por Méndez y está producida en los mismos talleres que Larrana, aunque con materiales menos exclusivos.