Lanvin ficha a Bouchra Jarrar para sustituir a Alber Elbaz como nueva directora creativa

Continúa el juego de tronos de la industria de la moda. Tras la abrupta salida el pasado año de Alber Elbaz, director creativo de Lanvin, la compañía ha incorporado a Bouchra Jarrar como nueva responsable artística de la línea de mujer. Jarrar se une a la lista de diseñadores poco conocidos para el gran público que, en los últimos años, han tomado las riendas de la dirección creativa de las principales compañías de lujo.

Nacida en Cannes (Francia), en el seno de una familia de origen marroquí, Jarrar creó su firma homónima en 2010 y ha ocupado diferentes puestos de responsabilidad en firmas como Balenciaga o Christian Lacroix, donde estuvo al frente del diseño de la línea de costura. La directiva se ha desarrollado sobre todo en la alta costura, y de hecho cuenta con la denominación oficial de alta costura que otorga la Cámara Sindical.

Jarrar se graduó por la Escuela Duperré de Artes Aplicadas de París en 1995, Jarrar trabajó para Jean Paul Gaultier antes de incorporarse a Balenciaga bajo la dirección de Josephus Thimister, según WWD. Cuando Ghesquière se puso al frente de la dirección creativa de la firma, Jarrar fue nombrada directora de estudio, un cargo que ocupó hasta 2006.

Poco después, Lacroix, para quien trabajó durante unos años, la animó a poner en marcha su propia firma. La diseñadora controla el 74% de su compañía, y el resto está en manos del fondo de inversión Mode et Finance, quien también tiene participaciones minoritarias en firmas como Lemaire.

En Lanvin, Bouchra no gestionará todas las líneas, como Alber Elbaz, sino que estará al frente sólo de la colección de mujer. Elbaz salió de Lanvin en octubre del año pasado por discrepancias con los principales ejecutivos de la compañía: Shaw-Lan Wang, propietario, y Michèle Hiuban, consejero delegado.

Elbaz formaba parte del accionariado de Lanvin, lo que habría frenado la marcha del diseñador en el pasado. El diseñador israelí no estaba de acuerdo en la estrategia actual de Lanvin, por lo que habría forzado a Wang a la búsqueda de un nuevo accionista capaz de desarrollar un nuevo plan de crecimiento.

Lanvin está en manos de Wang desde 2001, cuando compró la firma al gigante francés de la cosmética L’Oréal. Wang fue el responsable del fichaje de Elbaz, a quien dio el encargo de relanzar el negocio.

Las previsiones pasan por que las ventas de Lanvin se sitúen en 2015 en alrededor de 200 millones de euros, por debajo del pico de 250 millones de euros que alcanzaron unos años atrás. Está previsto que la firma registre sus primeras pérdidas en una década.