La Xunta de Galicia aprueba los 237 despidos en Caramelo

Sin agotar el plazo límite, la Conselleria de Trabajo de la Xunta de Galicia aprobó ayer el expediente de regulación de empleo (ERE) presentado por Caramelo para despedir a 237 trabajadores del grupo gallego de moda. Pese al rechazo frontal del sindicato CIG, mayoritario en el comité de empresa, al referéndum realizado por la plantilla el pasado 3 de agosto (en que se aprobó una propuestas de indemnizaciones), la Inspección de Trabajo consideró que la votación era válida y que, por lo tanto, el ERE había sido pactado por empresa y trabajadores. CIG, por su parte, se aferra a la asamblea del 23 de julio, cuando la propuesta presentada por la Xunta, que actuó en calidad de mediadora, fue rechazada en una votación a mano alzada. Las indemnizaciones para los trabajadores afectados, que la empresa asumió tras conocer el resultado del referéndum, ascenderán a 39 días de salario por año trabajado, con un límite de 34 mensualidades y 60.000 euros.Con el ERE aprobado, se desbloquea el plan industrial de la compañía que controla Manuel Jove, a través de la sociedad Inveravante, y que comporta un ahorro de costes de 22 millones de euros con el objetivo de recuperar una cuenta de resultados positiva. En enero, Inveravante colocó al frente de Caramelo a un nuevo equipo directivo, después de que el vehículo inversor del Jove, ex presidente de Fadesa, se hiciera con el 92,5% del capital del grupo. La dirección de la empresa, encabezada por Fernando Maudo, ex director general de Coronel Tapiocca, pretende dar un vuelco a la situación de la firma, que acumula tres años seguidos de crecientes pérdidas. El ERE, que afecta a 237 trabajadores de una plantilla total de 837 empleados, permitirá un ahorro de 4,4 millones de euros. El expediente afectará a 157 trabajadores de mano de obra directa, 60 empleados de mano de obra indirecta y 20 trabajadores de estructura, en su mayoría ubicados en la sede central de A Coruña. Los planes de la empresa prevén otros ahorros, de 7 millones de euros, gracias a la optimización de las compras, y de otros 6,9 millones gracias a la reducción de las devoluciones. Los gastos de explotación, según la hoja de ruta definida, se reducirán en 2,5 millones. La compañía también ha abierto una renegociación de los alquileres y estima que podrá obtener una rebaja media del 20% en las rentas a las que hace frente. De este modo, los ahorros previstos suman otros 0,9 millones. Caramelo, que posee las marcas Caramelo, Caramelo Jeans y Antonio Pernas, también quiere incrementar su facturación mediante una expansión internacional. La compañía aumentará su red de franquicias en el extranjero, así como su presencia en el canal multimarca, y reforzará también las tiendas propias. Actualmente, la empresa está presente en 28 países, con una red de 60 establecimientos entre tiendas propias y franquicias. Además, Caramelo distribuye sus productos a través de 800 puntos de venta multimarca.