La moda íntima de Alma Bloom se suma a la nueva oleada de concursos y entra en los juzgados

La moda íntima de Alma Bloom entra en los juzgados. La compañía española, fundada hace tres años por Piedad García, ha solicitado concurso voluntario de acreedores ante el juzgado número 8 de lo Mercantil de Madrid. La empresa se suma a una nueva oleada de concursos que afecta al sector. En los últimos meses, han entrado en los juzgados Hakei, Ursulitas, Bissú y Rebeca Sanver.

Alma Bloom se encontraba desde el año pasado inmersa en un ambicioso plan de desarrollo de su red comercial en España, apoyado en franquicias. Los planes de la empresa contemplaban alcanzar las treinta tiendas en 2018. Fundada en 2014, Alma Bloom distribuye artículos de lencería con un precio que oscila entre 25 euros y 80 euros.

El objetivo de la empresa de moda íntima era abrir nuevas tiendas bajo este modelo de negocio en ciudades como Barcelona, Palma de Mallorca, Bilbao y San Sebastián. Estos nuevos puntos de venta se sumarían así a los cinco que la empresa tenía en Madrid y otras urbes españolas, que ya no figuran en su página web.

Alma Bloom opera actualmente con una tienda en Roses (Girona) y una docena de puntos de venta multimarca

Actualmente, la empresa opera con una tienda en Roses (Girona), en el número 5 de la calle peatonal Riera Ginjoles. Alma Bloom cuenta también con presencia en el canal multimarca y está presente en una docena de puntos de venta en ciudades como Madrid, Vigo o Cádiz.

La compañía también dio sus primeros pasos en el extranjero, donde llegó a tener presencia en el showroom Hispashow, ubicado en París, donde contó con cuatro representantes. El año pasado, Alma Bloom generó el 15% de su facturación en Francia, Portugal y Latinoamérica.

La compañía de moda íntima emprendió el año pasado un plan de expansión de su red de tiendas

En estos países, la empresa alcanzó a operar con un showroom en la localidad lusa de Aveiro, y dos representantes para su expansión, mientras que concentraba su distribución en el canal multimarca en México y Chile.

Alma Bloom se suma a una nueva oleada de concursos que azota el sector desde hace unos meses. Rebeca Sanver entró ayer en los juzgados tras sufrir un fuerte descenso de las ventas. Bissú, por su parte, puso a la venta sus activos en julio tras presentar concurso de acreedores.

A las puertas de una tercera ronda, Ursulitas entró también en los juzgados y, finalmente, echó el cierre el pasado agosto. Hakei corrió la misma suerte y bajó definitivamente la persiana en abril, así como hizo Victorio&Lucchino.