Empresa

La italiana Elisabetta Polignano mira hacia España y tantea su entrada en el reino de Pronovias

I. P. Gestal

30 may 2016 - 04:41

Elisabetta Polignano

 

 

Elisabetta Polignano fija España en el punto de mira. Tras conquistar Japón y abrirse camino en Estados Unidos, la compañía de moda nupcial está en conversaciones para desembarcar en el mercado español, donde tendrá que enfrentarse a gigantes del sector como Pronovias o Rosa Clará.

 

Según han explicado desde la compañía a Modaes.es, “España es un mercado muy complicado, porque está dominado por dos operadores muy potentes”. Además, aunque el multimarca continúa teniendo un peso muy importante en el sector de la moda nupcial en España, los grandes grupos han construido también su propia red de retail, algo que en Italia continúa siendo mucho menos habitual.

 

Una de las pocas compañías que lo intentó fue Atelier Aimée, que llegó a contar con una treintena de tiendas en el mercado italiano, pero que se vio obligada a dar un paso atrás y terminó replegándose en retail. El año pasado, la compañía pasó a manos del grupo Calzedonia, que todavía no ha anunciado si volverá a apostar por desarrollar un parque de tiendas.

 

 

 

 

Elisabetta Polignano distribuye únicamente en establecimientos multimarca y en su atelier situado en la localidad italiana de Oleggio, cerca del aeropuerto milanés de Malpensa, y prevé entrar en España también a través del canal tradicional.

 

Fundada en 1997 por la diseñadora homónima, Elisabetta Polignano opera con tres líneas: Elisabetta Polignano Vision, creada para el mercado estadounidense y con un precio medio-bajo, Vittoria, de precio medio, y Elisabetta Polignano, la línea de gama. Las tres están producidas íntegramente en Italia.

 

La compañía factura en torno a dos millones y medio de euros y genera el 30% de sus ventas en el extranjero. Sus dos principales mercados fuera de las fronteras nacionales son Japón y Estados Unidos, donde cuenta con un showroom en Nueva York. “Es un mercado muy difícil; ahora estamos abriéndonos camino, pero hasta dentro de siete años no podremos decir que estamos realmente en Estados Unidos”, explican desde la compañía.

 

 

 

 

“La cultura de la novia allí es muy diferente –añaden–; el vestido no es algo tan importante para las novias”. “En cambio, en Italia es una parte central en toda la organización de la boda, y pensamos que en España y también en Latinoamérica la manera de comprar es muy similar a la italiana”, aseguran.

 

Por su parte, Japón se ha convertido en un mercado estratégico para muchas compañías italianas de moda nupcial “porque allí se valora mucho el made in Italy”, aunque tienen que enfrentarse a una cultura todavía muy asentada del alquiler. “