Empresa

La filial española de Bata vuelve a reducir capital en 2,6 millones para compensar pérdidas

S. Riera

9 jun 2015 - 11:00

Bata España reduce de nuevo su capital social. Dos años después de llevar a cabo la misma operación, la filial española del gigante del calzado ha vuelto a reducir capital, en esta ocasión en 2,6 millones de euros, para compensar pérdidas y restablecer su equilibrio patrimonial.

 

Según consta en el Registro Mercantil, la reducción de capital se realiza mediante la disminución del valor nominal de las acciones, que pasan de un valor nominal de 4 euros a 1,20 euros cada una. El capital social de la compañía queda fijado en 1,1 millones de euros.

 

La filial española de Bata, con sede en Sant Vicente de Raspeig (Alicante), ha llevado a cabo en los últimos años un fuerte plan de reestructuración en España para poder continuar con su actividad en el país. La empresa, que había llegado a tener hasta 300 trabajadores en España en 2007, ha ido reduciendo su personal al tiempo que iba echando el cierre a sus establecimientos en el país.

 

Entre 2008 y 2013, la empresa pasó de tener 69 tiendas en España a sumar sólo ocho. En este periodo, la sociedad española realizó una ampliación de capital de dos millones de euros para reducir la plantilla, que en la actualidad está compuesta por tan solo tres personas. Pocos meses después, la filial española realizó una reducción de capital por 3,75 millones de euros, para compensar pérdidas y restablecer el equilibrio patrimonial.

 

Una vez finalizada la reestructuración, la compañía reactivó la apertura de establecimientos y concluyó 2014 con una red de dieciséis puntos de venta en todo el territorio. El año pasado, la empresa cerró el ejercicio con una cifra de negocio de ocho millones de euros. En 2015, Bata España ha reorientado su estrategia para el mercado español. La compañía frena la expansión en el país de la cadena Bata, su enseña estrella, para potenciar el desarrollo de la de calzado y ropa deportiva AW Lab.

 

El giro de Bata en España se produjo justo después de que la compañía nombrase a Jack Clemons nuevo consejero delegado del grupo. El directivo, que entró en la compañía en 2006,  representa una nueva generación de jóvenes ejecutivos dentro de Bata, que han empezado a tomar cargos de primer nivel en la empresa.  Clemons sustituyó en el cargo a Rino Rizzo, cuya trayectoria en Bata se remontaba a 1969.

 

La empresa, cuyos orígenes se sitúan en 1894 en la República Checa, se estructura  en cuatro unidades de negocio globales: una para Europa, en Lausana; otra para la zona Asia-Pacífico y África, con sede en Singapur; otra en América Latina, en México, y por último, otra en América del Norte, en Toronto (Canadá). Bata está presente en más de 50 países a través de filiales locales. El grupo cuenta con 4.600 tiendas en todo el mundo y produce en 40 fábricas en 26 países.