Empresa

La crisis 'desnuda' al íntimo español

S. Riera

17 mar 2014 - 04:45

El íntimo no remonta. Las medias Platino, el íntimo de Evelyn y los calcetines Pocholo han echado el cierre en los últimos meses. Sus respectivas empresas, Dusen, Sadecor y Gallostra, son tres ejemplos de compañías españolas del segmento del íntimo y la calcetería que no han podido hacer frente a la deuda por el descenso de las ventas en España, donde tenían focalizado su negocio.

 

Dusen hizo entrega del inventario de bienes al administrador concursal a finales de febrero para que procediera a elaborar el plan de liquidación y poder poner a la venta el material almacenado para recaudar dinero para abonar las indemnizaciones de los trabajadores despedidos. Es el último paso de las medias Platino, cuya empresa propietaria entró en fase de liquidación el pasado verano.

 

La compañía, con sede en Castellón, solicitó proceso de liquidación voluntaria tras haber salido de dos concursos de acreedores, en 2011 y en 2007, y haber llevado a cabo diferentes expedientes de regulación de empleo (ERE), que habían dejado la plantilla en 82 empleados. Dusen, fundada en 1962, registró en 2009 una deuda de 8,6 millones de euros tras una fuerte caída de las ventas.

 

Sadecor, propietario de la enseña de íntimo y baño Evelyn, cerró sus puertas en febrero al no poder hacer frente a la deuda. La compañía, que cuenta con una plantilla de 19 personas, concluirá su actividad después de servir los pedidos de la colección de baño.

 

En los últimos años, la empresa había llevado a cabo tres expedientes de regulación de empleo, uno de ellos extintivo y otros dos de regulación temporal para ajustar la plantilla a la carga de trabajo. En 2010, la empresa solicitó concurso voluntario de acreedores. Sadecor, con sede en Palencia, fue fundada en 1979.

 

La empresa textil Gallostra, propietaria de los calcetines Pocholo, anunció el cierre a finales de 2013 al no superar tres planes de viabilidad. El fin de la actividad de la compañía, con sede en Pineda de Mar (Barcelona), supuso el despido de 125 trabajadores. Desde 2010, Gallostra atravesó por dificultades, que le llevaron a aplicar sucesivos ERE de extinción de contratos. La empresa estaba en concurso de acreedores desde 2012.

 

A finales de febrero, el juzgado de Mataró, donde se cursaba el concurso, condenó al propietario de la empresa, Francisco Javier Gallostra Pedemonte, a hacer frente con su patrimonio personal el pago de las indemnizaciones y salarios atrasados a un grupo de 56 trabajadores por haber desviado el patrimonio de la empresa de manera fraudulenta y en beneficio personal o hacia otras empresas de su órbita.

 

Estos cierres se suman al de Little Kiss. Hace un año, la empresa de íntimo y baño no superó el concurso de acreedores y liquidó su actividad. La compañía, con sede en Valencia, entró en los juzgados tras cortarse una línea de crédito de la que disponía en Banco de Valencia cuando éste fue intervenido por el Banco de España. La situación no le permitió llevar a cabo el plan de viabilidad que presentó en 2010. En 2011, la empresa, que contaba con una plantilla de cincuenta empleados, facturó cuatro millones de euros.

 

Grandes grupos en reestructuración

Uno de los gigantes del íntimo, DB Apparel, dejó de estar en venta el año pasado por falta de ofertas. El fondo estadounidense Sun Capital Partners, que compró en 2005 la división de íntimo en Europa de Sara Lee, desistió en la venta de la compañía, propietaria de las enseñas de lencería Wonderbra, Playtex y Dim, además de las españolas Abanderado, Unno y Princesa.

 

Tras un importante proceso de reestructuración, la compañía logró volver a los números negros en 2012 con un beneficio de 60 millones de euros y una cifra de negocio de 685 millones de euros. En 2010, la compañía cerró la última planta que mantenía en España.

 

Por su parte, VFB Lingerie Europe reorganizó de nuevo su pool de marcas a finales de 2013 dentro de su plan de reestructuración. La compañía, que fue adquirida en 2007 por Fruit of the Loom, ha eliminado las enseñas de origen español Gemma, Belcor e Intima Cherry para centrarse en el desarrollo de Vanity Fair, Lou, Vaiance y Bestform.

 

Además de reorganizar sus marcas, la compañía ha transformado su red de tiendas Vanity Fair en Tulip, ha llevado a cabo una reducción de capital y ha concentrado su actividad en las sedes de París y Barcelona. Los orígenes de VFB Lingerie Europe se encuentran en Vivesa, creada en 1949 por Josep Maria Vives Vidal en Igualada (Barcelona). En 1992, la empresa fue adquirida por el grupo VF Corporation, que quince años después vendió a Fruit of the Loom.

 

Otra de las grandes empresas españolas de medias y calcetería, Marie Claire, trata de dejar atrás el bache que casi la llevó al cierre en 2009. La compañía, con sede en Villafranca del Cid (Castellón) y con una plantilla de 622 empleados, ha ido reduciendo sus números rojos en estos últimos años. En 2011, Marie Claire facturó 44,5 millones de euros.

 

El grupo es propietario de las enseñas Marie Claire, Kler, Cherie y Onne, y produce también para marcas blancas. En la actualidad, la compañía está impulsando la distribución a través de córners en El Corte Inglés y estudiar entrar en el retail a través de franquicias.