La centenaria Guasch Hermanos, de los pañuelos a la ropa interior con el respaldo de la familia Puig

La centenaria Guasch, dedicada a la fabricación de pañuelos de tela, refuerza su división de íntimo y baño. La compañía catalana, en cuyo accionariado está la familia Puig, propietaria del gigante de la perfumería del mismo nombre, prevé aumentar el peso de los artículos de moda hasta el 60% de la facturación en los próximos años.

Según ha explicado el director general de la compañía, Lluís Costa, “los artículos de ropa interior, homewear y bañadores ahora copan alrededor del 50% de las ventas del grupo”. La compañía inició en 2004 la diversificación de su negocio, cuando empezó a fabricar camisas y corbatas, para virar hacia el íntimo y baño en los años siguientes.

Fundada en 1859 en Capellades (Barcelona), Guasch Hermanos inició su actividad como fabricante de tejidos y, al poco tiempo, comenzó producir pañuelos de tela. “En la primera etapa de la empresa nos encargábamos de toda la cadena de valor, desde la entrada del algodón hasta la confección de los pañuelos, pasando por el tinte, los acabados y la estampación”, detalla Costa.

Fue a partir de 1992, tras entrar en concurso de acreedores, cuando la empresa cambió su estrategia. Con el tiempo, la compañía logró levantar el expediente e inició un largo proceso de desindustrialización, que culminó en 2010 con la consolidación de dos sociedades: Guasch Hermanos, de íntimo, baño, pijamas y pañuelos para hombre, y Guasch Capellades, dedicada la gestión de la producción textil.

“Dejamos de ser una empresa vertical y nos encargamos del control y la gestión de la marca”, explica el directivo. Entonces, la compañía externalizó la producción y potenció el diseño y la introducción de nuevos artículos más allá de los pañuelos.

“Tuvimos un exceso de capacidad productiva y, además, en los ochenta había irrumpido el Kleenex –asegura Costa–; fue entonces cuando empezamos a fabricar otros artículos”. Esta estrategia se ha incrementado en la última década, aunque recientemente el grupo también ha optado por renunciar a algunas divisiones creadas en los últimos años, como la de textil del hogar.

Los artículos de Guasch pueden encontrarse en 2.000 puntos de venta multimarca repartidos por toda España. La compañía también está presente en una veintena de países, entre los que destacan mercados europeos como Francia, Italia y Reino Unido, además de México. Hoy en día, las exportaciones representan un 35% de las ventas de la compañía, un porcentaje que Costa espera elevar hasta el 50% en los próximos tres años.

Fuera de España, los artículos de Guasch se distribuyen a través de grandes almacenes como Liverpool y El Palacio de Hierro, en México, y Galeries Lafayette, en Francia. En el mercado español, el grupo vende también a través de El Corte Inglés.

El grupo ha externalizado su actividad

En los últimos años, el grupo ha externalizado su actividad, tanto en confección como a nivel de proveedores. “Fabricamos nuestros productos en talleres externos de Teruel y parte del tejido se realiza en Capellades a través de la sociedad Guasch Capellades, que se escindió de la matriz en 2007”, explica Costa.

Ambas empresas, propiedad de la misma familia, han profesionalizado su gestión y funcionan por separado. Guasch Hermanos también produce en China a través de una joint venture creada en 2007 con su socio en el país bajo el nombre Haimen Guasch Antesi.

La compañía, con sede en la ciudad catalana de Terrassa, cuenta con una docena de trabajadores y, en España, trabaja principalmente con cuatro empresas externas que producen parte de sus artículos. Guasch cuenta con un centro logístico en La Roca del Vallès (Barcelona), también externo.

En el ejercicio 2014, la cifra de negocio del grupo fue de cuatro millones de euros, la misma que el año anterior. Las previsiones Guasch Hermanos pasan por elevar las ventas un 8% en el ejercicio actual. El grupo no prevé, a corto plazo, entrar en retail como han hecho algunos de sus competidores.