Aïta ‘resucita’ cuatro meses después de su compra con un local en el centro de Barcelona

Aïta vuelve a ganar presencia en el mercado. La cadena de complementos, que el pasado diciembre fue rescatada de los juzgados por la familia propietaria de Kangaroos, se prepara para abrir el primer punto de venta de su nueva etapa. La sociedad Equus Hispalis ha firmado el alquiler de un local comercial en el centro de Barcelona donde implantará el nuevo concepto de Aïta.

El pasado diciembre, la familia propietaria de Kangaroos tomó el control de la marca y la red de tiendas de Aïta, que se encontraba en concurso de acreedores. Desde un inicio, los planes de los nuevos dueños pasaban por convertir los establecimientos para crear un concepto multimarca en el que distribuir las firmas españolas El Caballo, Victorio&Lucchino, Devota&Lomba, Elio Berhanyer y Javier Larrainzar, de las cuales es propietario o posee licencias.

Ahora, Aïta vuelve al mercado con su primera apertura tras el cambio de manos . La cadena se instalará en el número 21 de la calle Portaferrissa, en una operación intermediada por Ascana. El local cuenta con cien metros cuadrados de superficie distribuidos en un único nivel comercial.

Según han explicado a Modaes.es fuentes de Kangaroos, en los próximos meses están previstas más aperturas, en función de los locales que se encuentren en el mercado.

Aïta, que abrirá en el número 21 de Portaferrissa, fue adquirida por Kangaroos en el marco de un proceso concursal

A través de Equus Hispalis, Kangaroos se hizo con catorce tiendas de Aïta. La compañía reorganizará los puntos de venta y el 60% de la superficie de cada uno lo dedicará a Aïta, mientras el 40% restante lo dedicará a la distribución de firmas españolas.

Los orígenes de Kangaroos se remontan a 1979, cuando Luis López se introdujo en el negocio del calzado como fabricante. En 1986 la empresa se transformó en Kangaroos. La segunda generación de la familia ya está incorporada a la gestión de la empresa.

En los últimos años, la empresa ha experimentado un rápido crecimiento a través de la compra de marcas. La compañía centraliza todos sus procesos productivos en Fuensalida. Kangaroos, que también posee una fábrica en la India donde realiza procesos de corte, cerró 2014 con una producción de un millón de pares. El negocio de la compañía se situaba, antes de las últimas adquisiciones, en más de veinte millones de euros.