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Hierro y Albero lleva el ‘made in Spain’ a Oriente Medio tras cambiar de propietarios

F. Marín-Camp

20 feb 2015 - 04:47

hierro y albero

 

La moda española de Hierro y Albero busca dar el salto a los mercados internacionales. El grupo aragonés, especializado en moda femenina y masculina, proyecta su entrada a Oriente Medio tras cambiar de propietarios en 2013, tal y como explica su directora internacional, Elisabeth Forroll.

 

La intención del grupo es abrir un primer flagship store en Doha o Dubái antes de acabar el año. Tanto en Qatar como en Emiratos Árabes, “el producto español está muy bien considerado”, apunta Forroll, que dirige una marca con un fuerte componente made in Spain. Todos los artículos de Hierro y Albero se producen en el país y, en su mayoría, cuentan con algún detalle que hace referencia a la bandera española.

 

Hierro y Albero nació en 2004 de la mano de Alberto Perote y Federico López como marca vinculada al mundo de la tauromaquia. El grupo llegó a tener una treintena de tiendas en el mercado español. Débora Labarta compró la compañía en 2013 junto con otro socio con la intención de relanzarla. “El objetivo de los nuevos propietarios fue depurar la marca y ampliar su público –explica Forroll-; ahora la enseña gira en torno a la ganadería y al deporte”.

 

En paralelo a sus planes internacionales, Hierro y Albero proyecta media decena de aperturas en España para este año. La compañía, que actualmente cuenta con cinco tiendas en el país, está buscando locales en zonas prime de Madrid y Barcelona para instalar establecimientos propios, al tiempo que negocia con socios locales de Sevilla y Oviedo. Fuera de las grandes capitales, la enseña quiere crecer bajo el modelo de la franquicia.

 

Actualmente, la compañía cuenta con cinco tiendas abiertas en 2014 situadas en Madrid, Burgos, Salamanca, Zaragoza y Don Benito (Badajoz). Además, Hierro y Albero ha puesto en marcha este febrero un pop-up store en la avenida Diagonal de Barcelona “para testar el mercado catalán antes de establecer una primera tienda propia en la ciudad”.

 

“Depurar” la marca

 Antes de la adquisición por parte de Labarta, “Hierro y Albero era a la tauromaquia lo que La Martina es al polo”, tal y como suscribe Forroll. Tras el cambio de manos, la compañía ha empezado un proceso de “depuración” de la enseña para ampliar su público potencial. “El posicionamiento de la marca está entre Hackett y Carolina Herrera”, señala la directiva.

 

El grupo también dispone de un punto de venta en el estadio de polo de Estocolmo, herencia de los antiguos propietarios. Sin embargo, los países europeos no son ahora mismo una prioridad en los planes internacionales de la compañía.

 

Hierro y Albero, que cuenta con una veintena de trabajadores, produce todos sus artículos en talleres externos de Castilla y Aragón, además de Elche, donde produce los zapatos, y Ubrique, donde se fabrica la marroquinería. Por su parte, los diseños están liderados por Labarta y se realizan en la central de la compañía en Zaragoza. La empresa, que opera a través de la sociedad Purísima y Oro, prevé cerrar 2015 con una facturación de cinco millones de euros.