Hermès 'respira' al pasar el ecuador de 2009

El grupo Hermès ha levantado sus 'números' en la primera parte del año. Según los datos que ha presentado la compañía, las ventas aumentaron un 7,6% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. Los míticos pañuelos de la firma y los bolsos de cuero, con firmas como Birkin y Kelly, han conseguido despertar el interés del consumidor ya que el consumo registró un ligero retroceso en los últimos meses. Las ventas hasta el pasado junio sumaron 874,9 millones de euros, impulsadas por las líneas de accesorios de seda y en especial por los bolsos de piel. Otras líneas, como la de relojes o los productos de mesa, sí que se vieron "severamente afectadas" en la primer parte del año, aunque la casa francesa no ha querido dar más cifras.Este repunte de las ventas se debe en parte al mejor comportamiento de los mercados el segundo trimestre del año, entre abril y julio, periodo en el que las ventas crecieron un 12,2% llegando a los 446 millones. A pesar del crecimiento, Europa sigue lastrando los planes de la compañía ya que en este periodo solo creció un 1,2% - 176 millones - frente a las ventas en Asia que alcanzaron los 195 millones, un 29% más, y las Américas, donde la facturación sumó 65 millones, un 13% más. Hermès sigue cauta respecto al resultado global de este ejercicio marcado por la caída del consumo y los primeros signos de debilidad del mercado del lujo en la última década. En un comunicado, la firma explicó que "sigue con su tendencia a largo plazo" y que los resultados de la primera parte del año están en línea con las previsiones de la compañía, que cerró 2008 con unas ventas de 1.760 millones. "El grupo continuará invirtiendo en la segunda mitad del año y abrirá y renovará tiendas, especialmente en Asia y Estados Unidos", añadió la compañía.