Empresa

H&M cierra nueve establecimientos en Japón, mientras Inditex reabre

17 mar 2011 - 00:00

Modaes.- Si el pasado viernes era Inditex quien cerraba veinte establecimientos a causa del terremoto en Japón, hoy es H&M quien tiene que seguir los pasos de la empresa española cerrando nueve establecimientos que el gigante sueco posee en la región de Tokio.

Además del cierre de tiendas, H&M ha trasladado sus oficinas centrales a Osaka para una mayor seguridad, dónde le compañía posee un establecimiento que permanece abierto. El terremoto no sólo ha afectado a las infraestructuras de las cadenas de moda, sino que también se han visto resentidos sus valores en bolsa. En el caso de H&M, sus acciones han cedido un 0.09% en el Dax Xetra alemán.

 

El grupo liderado por Amancio Ortega continúa con varios establecimientos cerrados en Japón. Si bien es cierto que ya se han podido reabrir más de la mitad de las tiendas que el grupo gallego cerró el pasado viernes, a día de hoy aún quedan cinco establecimientos de Zara cerrados al público.

 

Zara, que emplea a más de 2.000 personas en el país y cuenta con 63 tinedas, tiene presencia en localidades como Osaka, Yokohama o Kyoto. Según ha informado Iniditex, la empresa española donará un millón de euros para ayudar al país a través de Cruz Roja Internacional.

 

Otra de la compañías que se han visto obligadas a cerrar sus establecimientos de forma preventiva ha sido Adolfo Domínguez, que cuenta con 31 establecimientos repartidos por el país. La empresa se ha visto obligada a cerrar cuatro establecimientos en Tokio a causa de los daños que han sufrido los edificios en los que las tiendas están ubicadas.

 

El resto de las tiendas funcionan con normalidad y la empresa espera poder abrir sus puertas lo antes posible. Igual que en Zara, ninguno de los empleados que Adolfo Domínguez posee en sus establecimientos, alrededor de 96, salió herido tras el terremoto.

 

Mango, que registra el 0,4% de su facturación global en el país nipón, también se vio obligada a cerrar de manera preventiva dos establecimientos de los siete que posee en el país. En este caso, según informan desde Japón, no fue la compañía quien decidió cerrar las puertas de las tiendas que Mango posee en los centros comerciales Lalampur y Marahui, sino que fueron las propias autoridades del recinto las que obligaron a los empresarios de la zona a cerrar sus negocio.