Empresa

Grifone: en venta la ‘Moncler catalana’ del ex presidente del Barça

La compañía leridana, que tiene entre sus principales accionistas al empresario andorrano Ramón Cierco y al expresidente del FC Barcelona, Sandro Rosell, busca comprador para evitar cerrar.

S. Riera/ G. Gómez

7 mar 2017 - 04:54

 

Grifone cuelga el cartel de en venta. La compañía leridana, especializada en prenda deportiva outdoor, negocia su venta para esquivar su cierre. La empresa, que tiene entre sus accionistas al empresario andorrano Ramón Cierco y al expresidente del FC Barcelona, Sandro Rosell, cuenta con unas “abultadas” pérdidas, según han explicado a Modaes.es fuentes del sector. La compañía no ha querido hacer declaraciones al respecto, aunque en sus establecimientos aseguran que han empezado a recibir la colección de verano.

 

La empresa ha abierto conversaciones con varios grupos inversores y de la competencia para cerrar su venta, aunque por el momento no hay ninguna opción en firme. Uno de los puntos débiles de esta operación es que Grifone perdió la licencia para el uso de la membrana textil Gore-Tex, de la que era uno de los pocos licenciatarios en España que la tenía.

 

La compañía, que nació en 1984 opera bajo la sociedad de Tèxtil Seu, con sede en la localidad de La Seu d’Urgell, situada a diez minutos en coche de Andorra. Grifone, que se quiso posicionar en el mercado como “la Moncler catalana”, dio un impulso a su trayectoria en estos últimos años con la entrada a su accionariado de Cierco, en 2011, y de Rosell, tres años después.

 

 

 

Ramón Cierco presidió junto a su hermano hasta 2015 la Banca Privada de Andorra (BPA), que en los últimos años ha estado en el ojo del huracán tras ser intervenida por la justicia estadounidense (que finalmente retiró la demanda) y haber tenido que dar explicaciones por casos relacionados con presunta ocultación de dinero de personalidades públicas, como la familia Pujol, entre otros. Cierco también estuvo en la directiva del FC Barcelona, aunque en 2015 dejó su cargo en el club.

 

Sandro Rosell, por su parte, presidió el FC Barcelona entre los años 2010 y 2014. Su carrera profesional ha estado vinculada al ámbito del deporte, pero también al de la moda. MBA por Esade, Rosell inició su trayectoria en la empresa catalana de perfumería Myrurgia para más adelante dar el salto al deporte, en el departamento internacional de márketing del comité organizador de los Juegos Olímpicos de Barcelona. A finales de los noventa estuvo en Nike.

 

Cuando Rosell entró en el capital de Tèxtil Seu, la compañía facturaba 2,1 millones de euros, según las últimas cuentas del grupo dipositadas en el Registro Mercantil y correspondientes al ejercicio 2014. Aquel año, la empresa redujo sus ventas un 16% en relación a 2013. Tèxtil Seu cerró el año con pérdidas de 1,7 millones de euros frente a los números rojos de 1,6 millones de euros del ejercicio anterior.

 

 

En 2016, la empresa fichó talento del FC Barcelona para reforzar su cúpula e incorporó al ex director de operaciones del club, Emili Sabadell, como nuevo consejero delegado. Sabadell relevó en el cargo a Eugeni Padròs, un antiguo directivo de Quicksilver, que siguió vinculado a la compañía como accionista. Éste último, que fue director general de la marca australiana para Europa y presidente para Latinoamérica, fue director general de Grifone. El directivo continúa vinculado al mundo de la moda con otros proyectos profesionales.

 

Grifone está especializada desde sus inicios en prendas de tejido técnico para combatir el frío. La compañía, que siempre asoció su imagen a los Pirineos, llegó a facturar hasta seis millones de euros antes de la crisis, aunque la mitad de su facturación procedía de pedidos públicos para policías y otros cuerpos de seguridad.

 

La empresa comercializa sus artículos a través del canal multimarca y El Corte Inglés. Con la entrada de Rosell y Padròs, la compañía se lanzó al retail y abrió establecimientos en Barcelona y La Seu d’Urgell. Grifone dio también sus primeros pasos en el extranjero, donde abrió un punto de venta en Argentina, en la estación de esquí de San Martín de los Andes, e inició conversaciones con posibles socios en Asia para abrir mercado en China, Japón y Corea.