Giorgio Armani reduce un 10,5% sus ganancias en 2017 lastrado por su reestructuración

La compañía, que ha cerrado su último ejercicio fiscal con un beneficio neto de 242,4 millones de euros, ya tenía previsto estos resultados debido a la reorganización de su cartera de marcas.

Modaes

2 ago 2018 - 12:15

Giorgio Armani cierra el año con pérdidas en plena reestructuración. La compañía italiana de moda finalizó su último ejercicio fiscal (cerrado el 31 de diciembre de 2017) con un resultado neto de 242,4 millones de euros, un 10,5% menos que en el mismo periodo del año pasado.

Los ingresos de la compañía, por su parte, se situaron en 2.330 millones de euros, un 7% menos que en 2016, cuando alcanzaron los 2.510 millones de euros. A tipos de cambio constantes, las ventas de Giorgio Armani cayeron un 5,8%, según WWD.

A cierre del ejercicio 2017, la posición financiera neta de Armani rebasó por primera vez en su historia los 2.000 millones de euros. Esta abultada cifra se debió sobre todo a la caja de la compañía, que a 31 de diciembre de 2017 se situaba en 1.000 millones de euros, frente a los 883 millones del año anterior. “Este elevado nivel de liquidez ofrece al grupo la oportunidad de realizar inversiones en sus propias marcas para seguir fortaleciendo su competitividad en los mercados internacionales y apoyar el reposicionamiento de sus marcas”, según ha explicado la compañía

Estos resultados no son inesperados, el grupo ya preveía reducir su facturación en este ejercicio fruto de los costes asociados a su proceso de reestructuración. “Se espera que esta reorganización dé como resultado una disminución gradual y temporal de los ingresos netos en los próximos dos años, para abrir una nueva fase de desarrollo y crecimiento en 2020”, explicaron desde la compañía.

Armani reorganizó su cartera de marcas para centrarse en Giorgio Armani, Emporio Armani y A/X Armani Exchange

La reorganización de Armani arrancó en 2017, tras la caída de la facturación experimentada en 2016. En abril del año pasado, la empresa inicio el despido del 60% de la plantilla de su fábrica de Italia, que afectó a más de un centenar de trabajadores.

El ajuste fue consecuencia de la reorganización de la cartera de marcas de la empresa, que supuso el fin de las enseñas Armani Collezioni y Armani Jeans. Esta nueva estrategia, que pasa por mantener sólo las marcas Giorgio Armani, Emporio Armani y A/X Armani Exchange, empezó a ser efectiva a partir de la pasada primavera.