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Fashiop: asistencia online para los anticompras

F. Marín-Camp

15 ene 2016 - 04:50

“Es como poner el armario masculino en piloto automático”. Así describen Carlos Solana y Eduard Coves, fundadores de Fashiop, el servicio que ofrece esta start up ideada como un personal shopper online para hombres. Ambos emprendedores se conocieron cursando un MBA de Iese y, sin experiencia previa en el sector de la moda, se embarcaron en un proyecto que permite a los consumidores masculinos renovar su vestuario sin salir de casa.

 

“A los hombres les gusta ir bien vestidos, pero a la mayoría no les gusta ir de compras -sentencia Solana-; buscábamos simplificar este proceso a los hombres de mediana edad que son conscientes de la importancia que tiene la imagen, pero que a menudo delegan en su mujer la tarea de ir de compras”.

 

En la actualidad, Fashiop cuenta con más de 200 usuarios registrados con los que dialoga a través del teléfono o por Skype para conocer su estilo y sus hábitos diarios. Tras la entrevista, la start up envía varias prendas al domicilio del cliente según sus gustos y presupuesto dentro de una caja que, de media, contiene artículos valorados en unos 300 euros.

 

“El cliente potencial tiene las prendas en el armario antes de haberlas pagado”, explica Coves. Este dispone de cinco días para decidir qué artículos quiere comprar y, una vez transcurrido este periodo, un mensajero se lleva el resto gratuitamente. “No todas las ventas conllevan devoluciones, porque a menudo el cliente se queda con todas las prendas -reconocen los emprendedores-; y no hay ninguna devolución sin venta”.

 

Ambos emprendedores se conocieron cursando un MBA de Iese y, sin experiencia previa en el sector de la moda, se embarcaron en un proyecto que permite a los consumidores masculinos renovar su vestuario sin salir de casa

 

Lanzada el pasado agosto, Fashiop dio sus primeros pasos tras un acuerdo comercial con el multimarca Conti y en sus cajas ahora hay artículos de marcas como Pepe Jeans, New Balance, Scotch&Soda, Dockers, Munich o Napapijri.

 

La start up basa su modelo de negocio en una comisión por cada una de las ventas realizadas, cuyos precios “son los recomendados por las tiendas”, destaca Coves. La empresa se puso en marcha con una inversión inicial de 100.000 euros, a los que se sumaron 60.000 euros más inyectados por Enisa, y ahora estudia la apertura de su capital para encarar su crecimiento. “Estamos buscando un socio de largo recorrido -asegura Coves-; queremos dar entrada a un partner de perfil industrial, siempre conservando el control de la empresa”. Los planes de Fashiop pasan por alcanzar 1.500 usuarios fidelizados en su primer año de vida.

 

Cubriendo un ‘dolor total’

El modelo de Fashiop cubre un “dolor total”, en palabras de Eduard Coves, uno de sus fundadores junto a Carlos Solana. Se refiere al dolor de ir de compras para todos aquellos hombres a los que no les gusta o que, simplemente, no tienen tiempo. En este sentido, uno de los objetivos de la start up pasa por entregar cajas donde todas las prendas puedan combinarse entre sí e, incluso, con las que el cliente ya tiene en su armario.

 

La aspiración de ambos emprendedores pasa por que los usuarios inicien una relación duradera con Fashiop. No les asustan las devoluciones de sus usuarios, ya que en los consumidores masculinos los ratios son más bajos que con las mujeres.