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El juez obliga a los Areces a vender acciones a El Corte Inglés

11 dic 2009 - 00:00

El Juzgado de lo Mercantil número 7 de Madrid ha ordenado que los hermanos Ramón, María Jesús y Rosario Areces Fuentes, tres de los cuatro sobrinos del fundador de El Corte Inglés, Ramón Areces, vendan provisionalmente a la compañía el 0,2% del capital por 16,53 millones de euros. Esta cifra supone casi un tercio de lo que solicitaban: 40,6 millones. El juez ordena la ejecución provisional de una sentencia que dictó en julio de 2008, que obligaba a los hermanos a vender una décima parte de su paquete, del 2,1% del capital, por el precio ofertado por el grupo de grandes almacenes. La decisión judicial se produce sólo a algunas semanas de que la Audiencia Provincial de Madrid dicte resolución ante el recurso de apelación presentado por los tres hermanos. El conflicto se remonta a diciembre de 2005, cuando los tres hermanos quisieron vender parte de su paquete accionarial, pero no llegaron a un acuerdo sobre el precio con El Corte Inglés, que tiene derecho de adquisición preferente sobre las acciones. En 2007, los Areces llevaron el conflicto a los juzgados.Por su parte, el otro hermano de la familia Areces Fuentes, César, estudia volver a demandar a la compañía que fundó su tío tras conocer que El Corte Inglés pagó a David González, otro heredero del fundador, más de lo que él recibió por la venta del 0,68% del capital. César Areces, que inició un conflicto en los juzgados en 2006, adelantándose al abierto por sus hermanos un año después, había alcanzado un acuerdo extrajudicial con El Corte Inglés para la venta del 0,68% de la compañía por 53 millones de euros. El precio obtenido por González por la venta de su 6% en la compañía fue, no obstante, superior, por lo que César Areces podría volver a demandar al grupo. Según César Areces, que inicialmente pedía 98,5 millones de euros por sus acciones, el acuerdo de venta firmado con El Corte Inglés estaba viciado por la influencia que tuvo en las negociaciones su mala situación económica y la deuda que tenía contraída con la compañía, de doce millones de euros. Asimismo, argumenta que David González percibió más por sus acciones sin que se estableciera un método de valoración concreto. Las acciones de El Corte Inglés, que no cotiza en bolsa, están mayoritariamente en manos de varios de los herederos de Ramón Areces, aunque el principal accionista es la Fundación Ramón Areces, que preside Isidoro Álvarez.