Empresa

El gigante chino Neo Concept hace borrón y cuenta nueva en España y liquida Siu Fashion en el país

S. Riera

1 sep 2015 - 04:55

Neo Concept empieza de cero en España. El fabricante chino de prendas de vestir, especializado en género de punto, deja atrás su etapa como licenciatario de Armand Basi y liquida su sociedad española Siu Fashion. En su nueva estrategia en el país, el gigante de Hong Kong reanuda su actividad como proveedor para terceros, tal y como avanzó Modaes.es.

 

La compañía china ha disuelto de forma voluntaria la sociedad Siu Fashion, según consta en el Registro Mercantil. El grupo puso en marcha su filial española en 2011 cuando tomó las riendas de la licencia de diseño, producción y distribución de la marca española Armand Basi, propiedad del grupo Basi. Dos años después de aquel acuerdo, la empresa china devolvió la licencia y echó el cierre a sus oficinas en Barcelona.

 

Con la disolución de Siu Fashion, la empresa ha querido poner punto y final a su proyecto con Armand Basi. Ahora, la compañía ha vuelto a retomar su actividad en España, pero sólo como proveedor para terceras marcas. Neo Concept volvió a operar en el país a finales de 2014 y cuenta ya con clientes como Inditex y Cortefiel.

 

Los planes de la compañía en el mercado español pasan por establecer de nuevo estructura propia en el país. Antes de finalizar el año, Neo Concept prevé crear una nueva sociedad y abrir oficinas en el centro de Barcelona. El nuevo proyecto en España estará pilotado por Oliver Meca, el actual responsable comercial de Neo Concept en el país.

 

En la primera mitad de 2016, la compañía planea engrosar la plantilla de la nueva sociedad española con un equipo de diseño, además de personal de apoyo comercial. Además de gestionar el diseño y la producción a terceros, la compañía china intentará introducir de nuevo sus marcas propias, Siu y Les100ciels.

 

Neo Concept es uno de los grandes productores chinos de prendas. La empresa cuenta en la actualidad con siete fábricas, después de abrir una última en Camboya de 6.000 metros cuadrados. El resto de los centros de producción están en China. En 2011, puso en marcha su última factoría en territorio chino, que contaba incluso con un hotel para invitados y un edificio de viviendas para sus 3.000 trabajadores.

 

En 2011, la empresa facturó 180 millones de euros. Fuera de China, la compañía cuenta con oficinas en Nueva York, Londres y Ámsterdam. La compañía se ha especializado en la producción de prendas de punto para un segmento medio y alto y, entre sus clientes, se encuentran las estadounidenses Banana Republic, Polo Ralph Lauren, COS o &Other Stories, entre otras.