El fundador de Thomas Sabo da un paso atrás y cede el timón de su compañía

Thomas Sabo da un paso atrás. El diseñador, fundador de la compañía de joyería homónima, ha decidido abandonar la gestión diaria de la empresa e incorporar un nuevo director general.

El diseñador, de 56 años, ha tomado esta decisión para evitar convertirse “en uno de esos patriarcas que no pueden dejarlo ir, siempre queriendo hacerlo todo por sí mismo, sólo para darse cuenta después de que no han logrado establecer un negocio sostenible”, ha explicado al diario alemán Nürnberger Nachrichten.

Sabo continuará vinculado a la empresa como accionista mayoritario y consultor en el desarrollo del diseño. Aunque todavía no está confirmado por parte de la marca, Gunnar Binder, el actual director financiero, podría asumir el puesto de director general tras su salida, mientras que Tony Björk, director comercial, asumirá nuevas responsabilidades.

Thomas Sabo podría ceder el testigo a Gunnar Binder, actual director financiero

Fundada en 1984, Thomas Sabo opera con alrededor de 300 tiendas en todo el mundo y está presente en más de 2.800 puntos de venta. La empresa, que da empleo a 1.860 personas, se ha marcado el objetivo de alcanzar 300 millones de euros de facturación para 2020.

En España, el grupo ganó posiciones el año pasado con la puesta en marcha de un nuevo establecimiento de referencia en Rambla Catalunya, en Barcelona, en un local que anteriormente ocupaba La Perla.