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El dueño de Magrit apuntala su producción con una nueva planta y se vuelca en EEUU

La empresa, con noventa años de trayectoria, ha implantado nuevos sistemas y metodologías de control de calidad y ha especializado su producción por tipología de calzado.

I. P. Gestal

15 abr 2019 - 05:00

El dueño de Magrit apuntala su producción con una nueva planta y se vuelca en EEUU

 

 

Magrit avanza a paso firme aupada por la producción para terceros. La compañía eldense de calzado, fundada hace noventa años por la familia Amat, ha apuntalado su capacidad productiva con una nueva nave en la localidad alicantina de Elda. En paralelo, la empresa sigue adelante con su marca propia, Magrit, tras abrir en 2016 su primera tienda en el corazón del lujo de Madrid.

 

En el último año, el grupo ha centrado sus esfuerzos en reforzar su área de producción para terceros, con una nueva nave que ya funciona al 50% de su capacidad. Este nuevo espacio se suma a la fábrica de 10.000 metros cuadrados que tenía hasta ahora.

 

Además, Magrit ha implantado nuevas metodologías de control de calidad y ha renovado su proceso productivo especializándolo por tipología de calzado, según han explicado desde la empresa familiar a Modaes.es. La compañía acaba de culminar también la implantación de un sistema lean para aumentar la eficiencia de la organización.

 

 

 

 

“Nuestros próximos pasos irán orientados a consolidar estos equipos de trabajo y afinar el eficiente funcionamiento de las nuevas instalaciones, que nos permitan adaptarnos con facilidad al aumento de la demanda de nuestros productos y servicios”, señalan desde la compañía.

 

Magrit también ha incrementado la plantilla con cuatro nuevas incorporaciones para los equipos de back office, ventas y comunicación. “Este incremento de la comunicación nos aporta nuevos leads comerciales, por lo que también debemos estar preparados en el departamento comercial y el back office para responder con agilidad, en los tiempos y formas necesarios”, subrayan.

 

Magrit da nuevos pasos en el extranjero

La marca Magrit, por su parte, también continúa avanzando. La compañía está presente en alrededor de cincuenta tiendas en el mundo y cuenta con una tienda propia en el número 19 de la calle José Ortega y Gasset, en Madrid, donde ofrece también un servicio de personalización de calzado.

 

Tras crecer un 10% en 2018, el objetivo de la empresa pasa ahora por continuar impulsando su presencia en los mercados internacionales, donde opera en grandes almacenes como Lane Crawford, en Hong Kong.

 

Las acciones a corto plazo están orientadas a aumentar la cuota de mercado en Asia y Estados Unidos, donde realiza ya campañas específicas de comunicación, aunque a medio plazo la compañía no descarta aterrizar en ciudades como Londres, Milán o París.

 

 

 

 

La historia de Magrit es la del calzado en uno de los mayores hubs del sector en España. “En Elda se consolidó un conjunto de industrias auxiliares de calzado y es centro de un clúster donde, para fabricar zapatos, se tiene todo muy cerca”, explica Pepe Amat Mira, miembro de la familia fundadora de la compañía.

 

El grupo echó a andar bajo el nombre de Margarita en 1929 de la mano de José Amat Sanchís. Amat, zapatero de profesión, comenzó con una fábrica de veinte empleados. Hoy, la compañía da trabajo a cien personas en la fábrica principal y cincuenta más en tres centros de montaje y acabado.