El dueño de Andrés Sardá avanza una caída de sus ventas en 2018 por el parón del retail

Van de Velde prevé un retroceso de sus ventas en 2018. El grupo belga especializado en íntimo, propietario entre otras marcas de la española Andrés Sardá, ha avanzado que estima para 2017 una evolución plana de su crecimiento o incluso una caída de su facturación. La compañía prevé que esto tenga también un impacto sobre los beneficios.

La empresa explica a través de un comunicado que el desarrollo de su canal de retail, en el que tradicionalmente ha sido activo, ahora no ha generado los resultados esperados. Por otro lado, Van de Velde apunta el lanzamiento de la línea de baño de Marie Jo y del crecimiento en nuevos canales como otros elementos para contrarrestar el ladrillo.

El grupo subraya también las inversiones previas realizadas en otras áreas para acelerar su crecimiento, como el posicionamiento de sus marcas y el desarrollo de nuevos canales, el desarrollo del ecommerce y la digitalización, y una mayor agilidad en toda la cadena de valor. Por otro lado, Van de Velde señala su empeño para mejorar el talento interno y atraer el externo.

El grupo, que presentó sus resultados de 2017 el pasado febrero, concluyó el último ejercicio con un aumento del 1,2% de su cifra de negocio, que situó en 209 millones de euros, y un incremento del 0,9% en el resultado neto, hasta 33,9 millones de euros.