El director general de Asos vende acciones de la compañía por casi 27 millones de euros

El director general y co-fundador de Asos, Nick Robertson, junto con otros directivos de la compañía han puesto a la venta acciones de la empresa por cerca de cien millones de libras esterlinas (133,7 millones de euros). La directiva se desprende de más de un millón de acciones que había ganado en un plan de incentivos. Robertson, por su parte, ha liberado además otros 840.000 títulos de su propiedad por valor de veinte millones de libras (26,7 millones de euros).

En total, el paquete de acciones que los directivos de Asos han puesto a venta representa el 2,3% del capital de la compañía de ecommerce. Tras la operación, Robertson mantendrá cerca del 8% de los títulos. La colocación de títulos se confirmó ayer, mientras Asos confirmaba un plan de inversiones para apoyar el incremento de las ventas y ante las expectativas de los analistas de que la empresa registre un alza del 37% en su resultado antes de impuestos, según The Telegraph.

La compañía británica aseguró ayer que invertirá cerca de 55 millones de libras (73,6 millones de euros) en los próximos dos años en aumentar plantilla y reforzar su infraestructura, en tecnología, logística y márketing. La inversión supera la del periodo 2012-2013, que se situó en 33 millones de libras (44,1 millones de euros).

Robertson apuntó que el 60% de las inversiones se destinarán a reforzar la estructura logística, en ampliar las plataformas que Asos tiene en Reino Unido y Estados Unidos, además de estudiar la construcción de un nuevo centro logístico en el norte de Europa. El director general de la empresa aseguró que para el ejercicio en curso se han marcado como objetivo alcanzar los 1.000 millones de libras (1.337,5 millones de euros) en ventas.

La venta de las acciones y los planes de inversión de la compañía se anuncian tras un año de reestructuración interna de la empresa, con el objetivo de poner freno a una caída de las ventas, sobre todo en el mercado europeo. La empresa cerró a lo largo de 2014 su filial francesa y tuvo que hacer frente  a la marcha de varios directivos de distintas oficinas europeas.