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El Corte Inglés, a las puertas de una junta clave en plena batalla familiar

La reunión del próximo domingo será clave para definir los protagonistas que pilotarán el grupo madrileño de grandes almacenes en una nueva etapa liderada por Jesús Nuño de la Rosa.

S. Riera

20 ago 2018 - 05:00

El Corte Inglés, a las puertas de una junta clave en plena batalla familiar

 

 

Junta clave para definir el futuro de El Corte Inglés. Tras un año de alta tensión, los principales accionistas de la compañía encaran su próxima reunión, que tendrá lugar el domingo 26 de agosto en la Fundación Ramón Areces y que determinará quiénes serán los protagonistas de la nueva etapa que inicia el grupo pilotada por Jesús Nuño de la Rosa.


Se trata de la primera junta de accionistas de El Corte Inglés presidida por Nuño de la Rosa y con el jeque catarí Sheikh Hamad Bin Jassim Bin Jaber Al Thani como tercer mayor socio de la empresa. En el orden del día se incluye la aprobación de las cuentas, que se hicieron públicas hace tres semanas, así como el cese y el nombramiento de consejeros.


Pese a no citar al expresidente del consejo de administración, Dimas Gimeno, de manera explícita, no será hasta el próximo domingo cuando se determine su permanencia como consejero. Por otro lado, también se tratará el futuro de otros consejeros, como Carlos Martínez Echevarría, Florencio Lasaga y Paloma García Peña (representante de Cartera Mancor), según avanzó Expansión a finales de julio. Todos ellos están pendientes de renovación.


A pesar de haber disparado su beneficio neto 25% en 2017 y haber mejorado sus ingresos en un 2,8%, hasta rozar los 16.000 millones de euros, la batalla familiar por hacerse con las riendas de El Corte Inglés continúa siendo el principal foco de atención. Y es que a pesar de que los resultados sean positivos, la deuda de la compañía es elevada y se buscará la estabilidad para dar confianza a la banca y a los mercados.


 


 

Primer vencimiento a la vista 

A principios de este año, la compañía refinanció un pasivo que asciende a 3.650 millones de euros. El primer tramo, de 1.200 millones de euros, vence en el arranque de 2019. En este sentido, hace unas semanas se hizo público que el grupo estaría negociando con varias entidades financieras una nueva emisión de bonos por más de mil millones de euros para el próximo otoño con el fin de cubrir esta primera parte del préstamo. El resto de la deuda tiene plazos a dos años y a cinco años.


Por otro lado, El Corte Inglés ha ido soltando ladrillo y, a principios de agosto, cerró la venta de dos locales más en los ejes prime de Madrid y Bilbao mediante operaciones de sale&leaseback. La operación se valoró en 100 millones de euros e incluyó los locales del número 41 en la calle Princesa de la capital y el del número 20 en la Gran Vía de Bilbao.


La operación se produjo un mes después de que la empresa activara un plan de desinversiones en activos por valor de 2.000 millones de euros. De hecho, la operación que cerró este verano es la primera de otras más que tiene en negociación y con las que espera captar otros 200 millones de euros antes del otoño.


El grupo tiene ofertas de compra por algunos de sus establecimientos más rentables, entre ellos los de Madrid, Barcelona o Marbella. El pasado octubre, la empresa cerró también la venta de un edificio en Sevilla por diez millones de euros. El año pasado, el grupo de distribución también se desprendió de un paquete de activos logísticos valorados en 300 millones de euros.


 

 

 

Batalla en los juzgados 

Mientras El Corte Inglés pelea en los mercados fórmulas para poder encoger su deuda, el conflicto familiar que mantienen las hijas del anterior presidente, Isidoro Álvarez, Marta y Cristina Álvarez, con su primo Dimas Gimeno continúa en los juzgados.


El tribunal número 12 de lo Mercantil de Madrid admitió a finales de julio a trámite la demanda presentada por Gimeno en la que solicitaba la impugnación del último consejo de administración de la compañía, en el que se le destituyó como presidente de la empresa.

El directivo solicita que se declare nula de resolución tomada en aquel encuentro, en el que se aprobó por unanimidad su destitución en la presidencia y el nombramiento en el puesto de Nuño de la Rosa.


 

 

 

Encaje del nuevo accionista 

Justo después del cese de Gimeno, venció el préstamo acordado hace tres años con el jeque catarí Sheikh Hamad Bin Jassim Bin Jaber Al Thani por mil millones de euros. Tal y como estaba establecido, El Corte Inglés devolvió la deuda con el 10% del capital de la empresa.


El inversor catarí tenía la opción de incrementar este porcentaje pactado con los intereses, que ascienden a 225 millones de euros, el equivalente al 2,25% de las acciones. No obstante, Al Thani ejecutó su opción de venta sobre este porcentaje.


A pesar de haber mantenido un perfil bajo en el conflicto familiar para tomar el control de la compañía, el inversor qatarí votó a favor del nombramiento del nuevo presidente en la reunión del consejo de junio. Al Thani, el primer accionista de El Corte Inglés ajeno a la familia fundadora y a su círculo inmediato de confianza, es en la actualidad el tercer principal accionista de la compañía y su voto será determinante para marcar las futuras acciones.


 

 

 

Redefinir un modelo en crisis 

El Corte Inglés continúa enfrentándose a los retos de un modelo de negocio en entredicho, la losa del ladrillo y la amenaza del online, con gigantes como Amazon o Alibaba ganando posiciones en España. En sus últimas intervenciones como presidente, Gimeno hizo un llamamiento a las instituciones españolas y europeas a buscar un marco normativo para poder competir con los grandes operadores online.


Los grandes almacenes, un negocio que en Europa lidera El Corte Inglés (tercero en el ránking mundial), están en el punto de mira. Los nuevos hábitos de consumo han hecho que los compradores se desplacen a otro tipo de espacios, ya sean digitales o físicos.

 

El Apocalypsis Retail estadounidenses ha sido especialmente duro con los grandes almacenes del país, como Macy’s, Sears, Kohl’s o Nordstrom. En Reino Unido, House of Fraser acaba de ser rescatado, mientras Marks&Spencer anunció hace unos meses el cierre de un centenar de establecimientos en el país. Con tráfico a la baja en sus puntos de venta, El Corte Inglés no escapa de esta amenaza internacional.