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Dogi reduce sus números rojos y pierde 3,3 millones en el primer semestre

Modaes

27 ago 2012 - 19:21

La compañía catalana Dogi International Fabrics, dedicada a la fabricación de tejidos elásticos, concluye el primer semestre del año con unas pérdidas de 3,3 millones de euros. En los seis primeros meses de 2011, la empresa obtuvo un resultado neto negativo de 4,75 millones de euros.

 

Las ventas del grupo, que en 2009 se vio abocado al concurso de acreedores, se han situado hasta junio en 20,47 millones de euros, lo que representa un retroceso del 0,5% respecto a los 20,57 millones de euros del primer semestre de 2011.

 

Por mercados, la planta española de Dogi ha reducido sus ventas un 0,5% en el primer semestre, pese a haber logrado transferir la producción del grupo Maidenform, que hasta ahora se realizaba en China. En lo que va de año, las ventas de Dogi España a Maidenform han ascendido a 650.000 euros.

 

Las ventas de la filial estadounidense, por su parte, han caído un 8% respecto al mismo periodo del año anterior. “Desde abril el mercado americano experimenta una caída general del consumo que está provocando descenso en las ventas y retrasos en la salida al mercado de nuevos proyectos”, señala Dogi.

 

Tal y como estaba previsto, la actividad productiva de Dogi China cesó el pasado 31 de mayo. El Gobierno chino expropió la factoría a la compañía con una indemnización de 11,5 millones de euros, de los que Dogi ya ha recibido el 90%.

 

“Debido a la evolución negativa de los resultados durante el ejercicio 2011 así como las dotaciones realizadas por el cese de la actividad fabril en China, el patrimonio neto de la sociedad dominante se encuentra por debajo de las dos terceras partes del capital social, por lo que de acuerdo con la Ley de Sociedades de Capital, la misma se encuentra transitoriamente en causa de reducción de capital social”, explica la compañía. En la junta general de accionistas celebrada el pasado junio se acordó llevar a cabo una reducción de capital, que quedará fijado en 6,57 millones de euros.

 

Según admite la propia empresa, “Dogi España sigue presentando una situación de tesorería muy tensa; el crecimiento de ventas no permite todavía tener una generación positiva de caja”. Sin embargo, según la compañía, “la capacidad de la sociedad americana para hacer frente a sus compromisos con la matriz y otros fondos procedentes de la filial China permiten garantizar la solvencia y viabilidad económica del grupo a medio plazo”.