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Custo Barcelona echa el cierre a una de sus tiendas más antiguas en el marco de una reorganización de su red

P. Riaño/ C. Pareja

12 abr 2016 - 05:00

Custo Barcelona echa el cierre a una de sus tiendas más antiguas en el marco de una reorganización de su red

 

Custo Barcelona sigue ajustando su red de distribución. La compañía catalana, controlada por los hermanos Custodio y David Dalmau, agota los días para bajar la persiana de una de sus tiendas más antiguas, ubicada en la calle Ferran de Barcelona. El cierre del establecimiento se enmarca en un plan de reestructuración de la red de distribución de la marca. Fuentes del sector señalan que la empresa ha sacado al mercado una de las últimas tiendas que ha abierto, ubicada en la calle Valencia de la capital catalana.

 

El establecimiento de la calle Ferran, en pleno barrio Gótico de la ciudad, es una de las más antiguas de la red de distribución de la empresa. El local se encuentra actualmente en fase de liquidación y echará el cierre definitivamente el próximo domingo, de manera que la empresa pasará a operar en el centro de Barcelona sólo con cuatro tiendas, tras dejar el año pasado el número 102 de Las Ramblas.

 

Según fuentes del mercado inmobiliario, el de la calle Ferran no será el único cierre que lleve a cabo Custo Barcelona, que se encuentra, según han señalado desde la empresa, “reagrupando” algunos de sus puntos de venta. A finales del año pasado, la compañía prescindió de su tienda del número 16 de la calle Serrano de Madrid y del punto del centro comercial L’illa Diagonal, en Barcelona.

 

 

Custo Barcelona cuenta actualmente con algo más de veinte tiendas en el mercado español. Según consta en su página web, la empresa tiene presencia en Estados Unidos (con una tienda en Nueva York, otra en Las Vegas, otra en Puerto Rico y cuatro en Miami), Rusia (un local en Samara), Italia, Mónaco y Andorra, con un establecimiento en cada país.

 

A lo largo de los últimos años, la compañía catalana ha reajustado su red de distribución y su estructura para hacer frente a la caída de las ventas. A mediados del año pasado, la empresa contrató a BBVA para valorar distintas vías de financiación, tras analizar la venta de una parte o de todo el capital.

 

Custo Barcelona finalizó el ejercicio 2014 con una cifra de negocio de 17,71 millones de euros, lo que supuso un retroceso del 9,33% respecto a los 19,54 millones de euros del ejercicio anterior, según las últimas cuentas disponibles en el Registro Mercantil correspondientes a la sociedad Blue Tower.

 

 

La reducción del 9,33% en las ventas de 2014 se hubiera situado en el 25% de no haber realizado un acuerdo de distribución con Lidl, que supuso unas ventas de 3,18 millones de euros, tal y como explica la propia empresa.

 

La compañía puso en marcha en 2014 un plan de choque que ha pasado por una reducción de los gatos de personal (con una disminución del 28% respecto a 2013 y trece personas menos en plantilla, con un total de 123 trabajadores) o un recorte en los servicios exteriores (un 17,56% menos).

 

En 2015, Custo Barcelona consiguió refinanciar su deuda con la banca, que asciende a 15,3 millones de euros. La compañía, cuyos préstamos hipotecarios gozan de garantía sobre inmuebles propiedad de Domus Viator (la patrimonial de los hermanos Dalmau), logró un periodo de carencia y alargó los periodos de vencimiento.