Empresa

Castañer proyecta 40 aperturas en Latinoamérica, Oriente Medio y Asia tras crecer un 5% en 2014

C. Pareja/ P. Riaño

2 feb 2015 - 05:00

Las alpargatas de Castañer continúan con paso firme en su apuesta por los mercados internacionales. La compañía se ha marcado el objetivo de poner en marcha entre cuarenta y cincuenta nuevas tiendas en los próximos tres años, tal y como ha explicado Domingo Barrachina, director general de la compañía, a Modaes.es en una entrevista.

 

Castañer ha cerrado 2014 con buen sabor de boca. La empresa, especializada en la distribución y fabricación de alpargatas de lujo, finalizó el pasado ejercicio (cerrado el pasado 31 de agosto) con un crecimiento en su facturación del 5%, hasta 24 millones de euros.

 

“Encaramos una nueva etapa de crecimiento en Castañer –explica Barrachina-; en los últimos meses hemos intentado profesionalizar la estructura con el fichaje de directivos para los departamentos de retail, wholesale, expansión o márketing”. “Es una empresa familiar que quiere ser global”, añade.

 

Domingo Barrachina se incorporó a Castañer el pasado septiembre para pilotar la expansión internacional de la compañía y llevar a cabo las funciones de director general. El ejecutivo comenzó su andadura en el sector a finales de la década de los noventa, como director comercial para el mercado español de la italiana Benetton.

 

En 2009, Barrachina pasó a formar parte del equipo directivo de la catalana Tous, ocupando el puesto de director comercial internacional durante casi cinco años. El último cargo que el ejecutivo desempeñó en Tous fue el de director de retail para Europa, Oriente Medio y África.

 

En la actualidad, Castañer cuenta con una red de distribución formada por quince establecimientos monomarca, ubicados principalmente en España y en el mercado asiático. “En el último año hemos cerrado dos establecimientos en Madrid, pero no eran rentables –explica Barrachina-; vamos a focalizar el crecimiento en desplegar una gran red de tiendas, por lo que si una no le reporta beneficios al grupo, no tiene sentido que continúe operando”.

 

El plan más ambicioso de Castañer es a tres años vista. “Queremos abrir entre cuarenta y cincuenta nuevas tiendas hasta 2017”, asegura Barrachina, que se apoyará en la fórmula de la franquicia para lograr este objetivo. A lo largo de este año, la compañía pondrá en marcha una segunda fase de crecimiento en Asia, con la apertura de nuevas tiendas. “En abril abrimos un nuevo establecimiento en Singapur”, apunta el directivo.

 

Latinoamérica es también uno de los focos de crecimiento de Castañer para los próximos años. La compañía ha firmado un acuerdo con la diseñadora colombiana Silvia Tcherassi para comenzar a operar en el país. El acuerdo entre ambas compañía contempla la apertura de tres establecimientos en la primera mitad de 2015. “Según la acogida de estas primera tiendas, se llevarán a cabo más aperturas a medio plazo”, asegura el directivo.

 

Silvia Tcherassi, que ya había llevado a cabo colaboraciones puntuales con la firma catalana, es una de la diseñadoras más reputadas de Colombia, además de por su vertiente creativa, por la capacidad empresarial. En 1990, la diseñadora se introdujo en el sector con la creación de la empresa Altamoda, con la que ha tejido una red de distribución (con tiendas propias y multimarca) en Colombia y en el extranjero.

 

En paralelo a su expansión en Colombia, Castañer también se encuentra actualmente negociando su entrada en México de la mano de un socio local, aunque por ahora la compañía no quiere dar más información sobre esta operación.

 

Castañer también está cerrando acuerdos para abrir una tienda en Miami, aunque Estados Unidos no será un foco de desarrollo de la compañía, “al menos de momento”. Sí lo será, en cambio, Arabia Saudí, donde la empresa ya prepara la apertura de dos tiendas, en Qatar y Dubái.

 

La empresa, fundada en 1927, exporta el 70% de su producción. Castañer, que con estas aperturas prevé impulsar sus ventas internacionales. La compañía, que inició su actividad produciendo calzado para campesinos, mantiene su sede en la localidad de Banyoles (en Girona), donde cuenta con una plantilla de cuarenta personas. Castañer, que ya cuenta con la tercera generación familiar totalmente incorporada en la gestión diaria del grupo, tiene una producción anual de 400.000 pares de zapatos.